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El Pepsi Center se llenó de energía y buena vibra la noche de ayer durante en concierto del argentino Bizarrap. Además de poseer un gran talento para hacer hits mundiales, logra crear un ambiente de fiesta increíble y llevarlo a un nivel inexplicable.
Minutos antes de comenzar el concierto, el público ya estaba más que extasiado y gritaba “Biza, Biza, Biza…” para que salieran el DJ y comenzar con la noche.
Pasando las 22:00 horas las luces del lugar se apagaron y los gritos fueron desenfrenados, la pantalla principal se prendió y se veía un robot en 3D no pasó mucho para sonara en el lugar “La Sessions #36”, canción que hizo en colaboración con Nathy Peluso y fue todo un éxito durante pandemia.
“Buenas noches México. ¿Están preparados o no? Bueno, vamos”, fueron las primeras palabras de Biza hacía su audiencia.
El argentino sabe cómo hacer a los cuerpos vibrar, pues entre los visuales, la atmósfera y la música, parecía que toda la gente estaba en auténtico rave, en otra época. Claro que el escenario era imponente y el sonido de alta calidad, esta mezcla transportó a los asistentes a un viaje musical inolvidable.
Temas como “Mamichula”, “#43”, “#10” y “#47”, hicieron saltar y corear a la audiencia, dejando al descubierto las habilidades de Bizarrap como DJ y productor. Había público de todas las edades, incluso muchas infancias llegaron al lugar en compañía de sus papás para disfrutar del fenómeno musical que es Biza.
Conforme avanzaba la noche, las colaboraciones sorprendentes y las actuaciones energéticas mantuvieron a la multitud en constante movimiento y emoción. Cada una de las rimas de los colaboradores y los beats de Bizarrap hicieron una fiesta de la música en grande.
“Hace cuatro años que vengo a México y siempre me reciben como mi casa, es mi segunda casa. Palabras de agradecimiento siempre de verdad”, expresó con mucho entusiasmo el argentino mientras era interrumpido por el público que gritaba: “Biza, hermano, ya eres mexicano”, por lo que hizo señas de abrazos y continuó con su repertorio.
Eso, reggaetón, trap y hip-hop fueron algunos de los estilos que abarcó la setlist de la noche. La diversidad musical aseguró que hubiera algo para todos los gustos. Uno de los momentos cumbre fue cuando tocó “La Session #53” con Shakira, uno de sus últimos éxitos y que ha cautivado al mundo.
El DJ dedicó una sección para los mexicanos en la que tocó sus colaboraciones con Peso Pluma y Natanael Cano. Las colaboraciones más esperadas quedaron para el final, temas con Young Miko, Nicky Jam y Paulo Londra.
Bizarrap le pidió al público unos minutos para tomar la foto de recuerdo y despedirse, claro que levantó la bandera de México, por lo que recibió muchas muestras de amor. Su “sessions” con Quevedo fue la que cerró la noche (como era de esperarse) y fue una explosión de emociones y mucho baile, a muchos nos traslada al verano 2022. Después de una hora y media las luces del lugar se encendieron y la gente comenzó a desalojar.
Con su talento innegable y su carisma magnético, Bizarrap demostró una vez más por qué es uno de los productores más influyentes y respetados de la escena musical actual.
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