Opinión

Andrés Manuel López Obrador versus Lorenzo Córdova Vianello

Andrés Manuel López Obrador versus Lorenzo Córdova Vianello

Andrés Manuel López Obrador versus Lorenzo Córdova Vianello

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Asistimos a una confrontación entre el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador y el presidente Consejero del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello. Se trata de una disputa sobre los criterios que norman la propaganda oficial durante las precampañas y campañas electorales. El punto de controversia, en específico, consiste en que Lorenzo Córdova Vianello señaló, durante su participación en el seminario Las Redes del Odio en México, organizado por el Colegio de México, que, a partir del inicio del período de las campañas electorales, es decir, el 4 de abril, las “mañaneras” deben dejar de transmitir íntegramente y se retomarán cuando concluya el proceso electoral, esto es, después del 6 de junio. El Jefe del Ejecutivo no estuvo de acuerdo y dijo que acudirá a instancias judiciales para revocar esa decisión.

En la mañanera de este martes AMLO señaló: “Son dos cosas: acudir a instancias judiciales en caso de que haya una prohibición porque sería un acto de censura, sería un agravio, un atentado a la libertad, eso no puede prosperar, desde el punto de vista constitucional y legal.

“Y lo segundo, yo aprovecho para convocar a los mexicanos a que opinen si está bien que el INE nos silencie, si está bien que en México, en nuestro país, no pueda hablar el Presidente, no pueda informar…como ya está de moda a nivel mundial la censura [en clara alusión a que Twitter y Facebook bloquearon las cuentas de Donald Trump después del asalto al Capitolio, cosa con la que no estuvo de acuerdo AMLO], ya nos quieren silenciar y es una actitud de mucha intolerancia, cómo nos van a quitar el derecho de expresión, de manifestación, cómo le quitan al pueblo el derecho a la información.” Por la tarde, Lorenzo Córdova Vianello aclaró que el INE no ha sugerido suspender las conferencias matutinas del titular del Poder Ejecutivo, sino simplemente evitar la transmisión íntegra de éstas, de acuerdo con los criterios normativos vigentes.

El apartado C del artículo 41 de la Constitución prescribe: “Durante el tiempo que comprendan las campañas electorales federales y locales y hasta la conclusión de la respectiva jornada comicial, deberá suspenderse la difusión en los medios de comunicación social de toda propaganda gubernamental, tanto de los poderes federales, como de las entidades federativas, así como de los Municipios, de las demarcaciones territoriales de la Ciudad de México y cualquier otro ente público.”

La actual querella de López Obrador no coincide con su manera de proceder en otras ocasiones. Por ejemplo, el 28 de mayo de 2019 el presidente dijo estar de acuerdo con la omisión de las conferencias en las entidades que celebraran elecciones y añadió que no hacía falta que el INE le mandase una notificación. De hecho, en la aclaración que Córdova Vianello hizo respecto del pronunciamiento del tabasqueño, “recordó que en los procesos electorales de 2019 y 2020, el gobierno federal y los medios de comunicación acataron la resolución de la autoridad electoral, que pidió no difundir de manera íntegra las conferencias matutinas del presidente en las entidades en competencia.” (El Universal, 13/01/2021).

¿Por qué López Obrador ha cambiado respecto del papel que desempeñan las mañaneras en los comicios, y frente a la autoridad electoral? Una posible respuesta consiste en que en las elecciones del próximo 6 de junio estarán en juego 21 mil puestos de elección popular. Sobresale, entre ellos 500 diputaciones federales y 15 gubernaturas, así como 30 legislaturas locales. Tiene miedo de perder el control de la Cámara de Diputados: si la oposición logra arrebatarle la mayoría en ese órgano colegiado perdería el dominio sobre el Poder Legislativo. Además, para hacer cambios en la Constitución requiere que haya mayoría calificada, es decir, dos tercios en ambas instancias de la rama legislativa, más la aprobación de al menos la mitad de las legislaturas locales, vale decir, 17 congresos estatales.

Para lograr su propósito autoritario es fundamental la propaganda gubernamental (expresamente prohibida, como hemos señalado, por la Constitución) y que en este sexenio se ha centrado en las mañaneras. Esgrimiendo una falsa libertad de expresión, lo que, en realidad, López Obrador quiere dañar es la equidad en la competencia electoral.

Considero que hay un falso dilema en esta controversia entre López Obrador y Córdova Vianello: el primero arguye que las mañaneras son para informar; el segundo esgrime que pueden ser tomadas como plataforma de proselitismo. Empero, la ley es muy clara: habla de “propaganda gubernamental”, en la que, por derivación lógica, se incluye la difusión de obras o actividades de la administración pública federal. Ese es el criterio que ha prevalecido desde hace años en los tres ordenes de gobierno. No hay que darle vueltas.

Además, para nadie es un secreto que las mañaneras, hablando sinceramente, son un foro de autoelogios y un sitio desde el cual se lanzan ataques a los partidos de oposición, la prensa crítica, los periodistas incómodos. El púlpito desde el cual predica el mesías tropical.

Como dijo Aristóteles: “La principal amenaza que encaran las democracias es la insolencia de los demagogos.” (La Política, 1304b20-1304b25).

Twitter: @jfsantillan

Mail jfsantillan@tec.mx