A dos semanas de que la Selección Mexicana de futbol regrese a la actividad en este caótico año 2020 marcado por la pandemia del coronavirus, se establecerá una burbuja para la preparación del equipo tricolor, al mando de Gerardo Martino para medirse a Costa Rica el día 30.

Para ello se establecerá un cerco sanitario desde la próxima semana en la que está previsto realizar un microciclo con los futbolistas que serán convocados por el “Tata” Martino, solamente de la Liga MX, ya que los que juegan en el extranjero no serán convocados.

En el duelo a celebrarse en el Estadio Azteca a puerta cerrada, desde su llegada a la concentración los jugadores serán sometidos a pruebas PCR y serán monitoreados día a día, al igual que a todos los integrantes del cuerpo técnico.

Los seleccionados recibirán a su arribo al Centro de Alto Rendimiento (CAR) de la Femexfut, un kit que incluirá gel antibacterial, mascarillas y toallas sanitizantes, además de que se tendrán que duchar en sus propias habitaciones, ya que está prohibido el uso de vestidores, entre otras medidas de seguridad.

Para el día del partido, al Coloso de Santa Úrsula, solamente podrán entrar 300 personas máximo.

El conjunto costarricense deberá hacerse las pruebas PCR antes de viajar a la capital mexicana y se les hará otro examen a su llegada, además de que estarán controlados durante su estancia en territorio nacional, para que no tengan que hacer cuarentena para su regreso a Costa Rica.