Lía Limón, candidata a la alcaldía Álvaro Obregón por la coalición “Va por México”, no ha revelado que es dueña de tres inmuebles de lujo que están valuados en 50 millones de pesos. Los inmuebles no aparecen en los ejercicios denominados 3x3 con los que, a propuesta de la sociedad civil, se deja saber a los ciudadanos de las propiedades y otros intereses de los candidatos o funcionarios.

De acuerdo con información en poder de Crónica, la candidata aliancista ha optado por ocultar estas propiedades, algo relevante luego de que se acusase de estar financiada por el llamado cartel inmobiliario, un grupo de funcionarios locales que presuntamente prestaría servicios a constructoras a cambio de bienes.

Limón, una política que ha ocupado diferentes cargos en la administración pública federal, precisó en sus declaraciones patrimoniales que es propietaria de un departamento ubicado en Arquímedes, en Polanco, que tiene un valor aproximado de 23 millones de pesos; otro más en Rincón del Bosque en Miguel Hidalgo, con un costo de 17 millones de pesos; así como un departamento en Santa Fe, que cuesta 10 millones de pesos aproximadamente.

Todas estas propiedades, aceptadas en la opacidad, resultan difíciles de conciliar con los ingresos obtenidos por los cargos públicos que ha ocupado desde hace años. La candidata alega “donaciones”, de acuerdo a la documentación en poder de Crónica.

Cabe precisar que en su declaración patrimonial 2004, presentada como Directora de Asuntos Internacionales en el Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI), Limón declaró únicamente uno de estos departamento (230 metros cuadrados de superficie con valor de 1 millón 645 mil pesos), y especificó por primera vez que era beneficiaria de “una donación”. Su declaración de 2004 fue abierta al escrutinio de la ciudadanía. Después de aquella fecha, Limón decide que sus declaraciones sean protegidas (sólo visibles a auditores oficiales) y, a su salida de la Subsecretaria de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos de la Segob y su postulación a un cargo de elección popular en 2015, ya en un esquema opaco, acepta la propiedad de más departamentos, nuevamente adquiridos a partir de donaciones o herencia (uno solo en este último rubro).

Al departamente de Álvaro Obregón se suman los de Miguel Hidalgo y Cuajimalpa. Uno es un inmueble de 176 metros cuadrados con valor de 5 millones 700 mil pesos (donación en el año 2011); el otro es de 85 metros cuadrados adquirido también por donación el año 2007 con un valor real de 480 mil dólares.

Todas estas propiedades suman un total de 50 millones de pesos que la candidata no dijo que tenía y que además no concuerdan con los ingresos obtenidos por los cargos públicos que ha ocupado.