Senadores de Acción Nacional responsabilizaron a la mayoría parlamentaria de Morena y sus aliados de un posible brote de contagios en el Senado de la República luego de la sesión realizada en la vieja Casona de Xicoténcatl, pues aseguraron que ese recinto no cumplía con las medidas sanitarias de ventilación y sana distancia, además de que contó con la presencia de legisladores positivos a COVID-19.

“Lo que pasó hace un par de días en el Senado es una irresponsabilidad que yo espero que no tenga consecuencias severas, porque por más que hayan forzado a un funcionario de salud decir que había condiciones para sesionar, cualquiera que tenga ojos podría ver que no existían condiciones adecuadas de salud”, acusó el senador Damián Zepeda

Evidentemente –dijo- era una zona de contagio, con legisladores que estaba dudoso si tenían o no contagio, con otros que no sabemos si tenían síntomas o no que ya salieron algunos que resulta que sí estaban enfermos.

Demandaron que de cara a las actividades parlamentarias de la próxima semana se realicen pruebas a todo el personal, pues advierten, es un riesgo que puede prevenirse.

“Parece que no les importa, basta verlos ahí andan con el cubrebocas como si fuera cubre barbas, algunos de ellos quitándoselos, haciendo bromas, a mí me parece una irresponsabilidad absoluta y yo si creo que están rayando en el delito de contagio…”

La senadora Xóchitl Gálvez acusó que el PAN ha registrado dos casos de senadoras que han dado positivo a Covid a raíz del caso del senador de Morena, Alejandro Armenta, quien informó que dio positivo hace una semana.

Gálvez reconoció que el morenista no tenía conocimiento de que tenía Covid pero encabezó una reunión de la comisión de Hacienda y la panista Indira Rosales estaba a su lado. “A los 7,8 días dió positivo”, explicó

Sin embargo, Armenta acudió a la sesión del pasado martes en la noche donde Morena y sus aliados aprobaron la extinción de los 109 fideicomisos pese a que senadores de oposición reprocharon su presencia en un salón pequeño.

El presidente del Senado, Eduardo Ramírez aclaró que no se podía restringir sus derechos humanos.