Escenario

“C’mon C’mon: Siempre adelante”. Un viaje al interior de las emociones y los sentimientos

CORTE Y QUEDA. Es una obra muy inteligente y genuinamente conmovedora, en la cual dos personajes distanciados geográfica y sentimentalmente, cuyas existencias han sido lesionadas por diferentes motivos, ausencias y angustias

cine

El filme dirigido por Mike Mills es protagonizado por Joaquin Phoenix y Woody Norman.

El filme dirigido por Mike Mills es protagonizado por Joaquin Phoenix y Woody Norman.

CORTESÍA Tobin Yelland

Más de un lustro después de haber lanzado 20th Century Women, su último largometraje; el cineasta californiano Mike Mills regresa con C'mon C'mon: Siempre adelante, una especie de road movie intimista, fotografiado en blanco y negro por la lente del irlandés Robbie Ryan y en donde sus dos personajes principales recrean en pantalla una relación muy particular, estrecha y de mutuo aprendizaje.

Johnny (Joaquin Phoenix) es un periodista que vive en Nueva York y trabaja en la radio. Junto con un modesto equipo de trabajo, está desarrollando un proyecto el cual tiene como objetivo plasmar la percepción que se tiene de la vida y otros temas, desde una mirada infantil. Para llevarlo a cabo, se da a la tarea de viajar por diversos rincones de los Estados Unidos, para registrar en audio las opiniones de diversos menores.

La vida adulta de Johnny ha sido marcada por dolorosas pérdidas: la de su madre –acaecida un año atrás-; la de su pareja quien decidió abandonarlo; y la del contacto estrecho con sus familiares más cercanos: su hermana Viv (Gaby Hoffmann) y su sobrino de nueve años, Jesse (Woody Norman), los cuales radican en Los Ángeles.

El filme brilló en la crítica para el cierre del año pasado pero no le alcanzó para figurar en la temporada de premios.

El filme brilló en la crítica para el cierre del año pasado pero no le alcanzó para figurar en la temporada de premios.

CORTESIA

Mientras se encuentra laborando en su proyecto, al periodista le surge el impulso de llamar por teléfono a su hermana, con quien no ha hablado desde la muerte de su progenitora. Ella decide sincerarse con él, y le confiesa que se halla desesperada a causa de Paul (Scoot McNairy), su pareja y padre de Jesse, quien tiene un historial de desequilibrio mental y emocional, el cual se ha mudado a Oakland por cuestiones de trabajo, pero está atravesando por una severa crisis y necesita ayuda. Ella quiere acudir en su auxilio, pero no puede llevar consigo al menor. Su hermano decide apoyarla, viajando hasta la ciudad donde viven para hacerse cargo de su sobrino por un par de días.

Las cosas se complican para Viv, y se ve obligada a quedarse unos días más con Paul. Por otro lado, Johnny no puede postergar por demasiado tiempo su estadía en Los Ángeles, ya que debe regresar para continuar con el proyecto, y seguir recopilando testimonios. Así que toma la un tanto temeraria decisión de llevarse consigo a su inteligente e hiperactivo sobrino. Y este será el inicio de una jornada donde, mientras el periodista desempeña su labor, tendrá una convivencia más cercana y constante con su sobrino, la cual tiene momentos placenteros y divertidos, pero también otros muy complicados y tensos.

A diferencia de los relatos convencionales de este tipo, en donde la mirada puede resultar demasiado complaciente o amable, el argumento de C'mon C'mon: Siempre adelante, escrito por el propio Mills, decide en cambio enfatizar la construcción de la relación de su pareja protagónica (el experimentado Phoenix y el talentoso menor Norman) justamente a partir de los diversos tropiezos con los cuales se topa su relación familiar (derivados de sus respectivas problemáticas), y la manera en que lidian con ellos e intentan resolverlos, a partir de escuchar al otro, comprenderlo y tratar de empatizar con él, valiéndose de una serie de herramientas y estrategias de tipo pedagógico.

Lo interesante es que este proceso funciona en dos direcciones, y ambos personajes comienzan a reconocerse en el otro, a comprenderse un poco mejor entre ellos. Y durante dicho proceso, también se autodescubren y, en el caso específico de Johnny; este comienza a cuestionarse acerca de sus decisiones y procederes en su vida adulta actual.

Se perfila para lo mejor del año, sin duda.

Se perfila para lo mejor del año, sin duda.

CORTESIA

De manera transversal a lo que acontece con el peculiar dúo protagónico, se pueden escuchar los diferentes testimonios de los entrevistados, los cuales contrapuntean perfectamente la narración principal, al opinar y reflexionar sobre temas como el futuro, el amor, la muerte, y especialmente, sobre su relación con los adultos y su mundo, a los cuales no siempre entienden a cabalidad.

C'mon C'mon: Siempre adelante, resulta una obra muy inteligente y genuinamente conmovedora, en la cual dos personajes distanciados geográfica y sentimentalmente, cuyas existencias han sido lesionadas por diferentes motivos, ausencias y angustias; hacen un viaje al interior de las emociones y sentimientos del otro (y a los propios), donde logran descubrirse, identificarse, aprender, entenderse y finalmente abrazarse física y espiritualmente.

Y el filme aplica a pie juntillas y en todo momento, una máxima acuñada por uno de los personajes: “Sé divertido, cuando puedas”.