Costalegre es un corredor turístico con una combinación de playas vírgenes y pintorescos poblados conformado por seis tramos costeros: Bahía de Navidad, Bahía de Tenacatita, Costa Careyes, Bahía de Chamela, Costa Majahuas y Cabo Corrientes; las cuales se distinguen una de otra por sus diferentes características geográficas, su arquitectura y las actividades que pueden desarrollarse en ellas.Y justamente la puerta de entrada a la Costalegre quedó reconstruida tras le paso del huracán Jova que hace tres años devastó gran parte de este paradisiaco destino pero que ahora ya se encuentra listo para recibir al turismo que decide pasar la Navidad en la playa.Y es que adentrarse por estos lugares es descubrir paisajes costeros de selva y de montaña entre caletas, playas, esteros, islas y múltiples variantes de esta exuberante y hermosa bahía, la sensación de saberse en un sitio único e inigualable, le llevarán a enamorarse por siempre de estas playas. Sin duda un destino versátil y fuera de lo convencional, orientado hacia la ecología.La Bahía de Navidad posee un mágico mar que sirve de escenario de una maravillosa estadía, por sus diferentes texturas y colores de arena, del vaivén de las olas, y una infinita gama de experiencias agradables. Sus sitios son ideales para disfrutar del sol, realizar actividades y deportes de playa, pasear en lancha, ir de pesca, explorar su selva tropical, descubrir y gozar de cada inolvidable instante de sus pueblosEn Barra de Navidad, nos encontramos con un pintoresco pueblo de pescadores, playas que contrastan perfecto con su arena, el azul de su cielo y una de las mejores caídas de sol más vistosas del Pacífico Mexicano.Después está Melaque, una playa mágica donde el ir y venir de las olas es un juego al que el viajero se presta fácilmente, dejándose enamorar por la suave corriente que le acaricia o tirándose al sol para obtener un magnífico. Y para cerrar con broche de oro se sugiere visitar la playa Cuastecomate, un sitio tranquilo para gozar del mar, practicando el esnórquel y disfrutando el sol… Incrustado en la costa, se encuentra este pequeño pueblo, ubicado en una bella ensenada que protege sus playas. De hecho está en una etapa de acondicionamiento pues se convertirá en la primer playa incluyente del Pacífico Mexicano y segunda en ese tipo en el país.La oferta hotelera y de servicios de turismo en la zona ya reporta una ocupación del 75 por ciento y se reporta lista para recibir a visitantes que en su mayoría son de Guadalajara.
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