
Primer descanso: Preparativos para la sede tricampeona
La Ciudad de México se declaró lista para recibir la Copa Mundial de la FIFA 2026, que la convertirá en la única ciudad del planeta en albergar por tercera ocasión la inauguración del torneo, tras hacerlo en 1970 y 1986.
De acuerdo con el calendario oficial, la capital será escenario de cinco encuentros —el inaugural el 11 de junio, seguido por partidos el 17, 24 y 30 de junio y el 5 de julio—, además de concentrar la mayor parte de los flujos turísticos hacia México.
El gobierno capitalino informó que las obras e intervenciones urbanas vinculadas al evento se encuentran en marcha. Entre los proyectos figuran la modernización del Estadio Ciudad de México, cuya reinauguración está prevista para el 28 de marzo de 2026, así como trabajos de mejora en iluminación, movilidad, drenaje, agua potable y espacios públicos.
En el Centro Histórico, por ejemplo, se instalarán 42 kilómetros de nuevas luminarias en coordinación con el Instituto Nacional de Antropología e Historia y el Fideicomiso del Centro Histórico.
La jefa de Gobierno, Clara Brugada, explicó que el Mundial actúa como un “acelerador de metas” para mejorar la infraestructura de la ciudad.
“No llevaremos a cabo obras de relumbrón, sino infraestructura que sirva a la población”. Cada semana se informará sobre los avances en los distintos rubros —obras, seguridad, servicios, deporte y cultura—, anunció.

Segundo descanso: Una fiesta con valores y participación social
Además del enfoque deportivo, la administración capitalina busca que el Mundial sea una celebración con enfoque social, incluyente y con perspectiva de derechos humanos.
El gobierno local prepara 19 “Festivales Futboleros” distribuidos en las 16 alcaldías, con pantallas gigantes para seguir los partidos, actividades culturales y espacios deportivos.
También se construirán 100 nuevas canchas de futbol y se rehabilitarán otras 400, en coordinación con las alcaldías. En el ámbito comunitario, más de 7 mil niñas y niños participan en el Torneo Infantil Comunitario Ollamaliztli, que ya suma más de mil partidos y tres mil goles. En este torneo colaboran ACNUR y UNICEF para incluir a menores refugiados y promover valores de convivencia.
La capital organizará además la clase de futbol más grande del mundo, el 1 de marzo de 2026, y la “ola” más grande del mundo el 31 de mayo, ambas con la meta de establecer récords Guinness.
Durante el desarrollo del torneo, el 21 de junio se llevará a cabo un desfile mundialista sobre Paseo de la Reforma, que mostrará la diversidad cultural de México y los países participantes.
Para los habitantes, se propone que el 11 de junio —día inaugural— sea una jornada de fiesta nacional.
“Queremos que ese día paremos un poco y podamos vivir la inauguración del Mundial”, expresó Clara Brugada, quien señaló que la iniciativa se coordina con el Gobierno Federal y el sector privado.

Tercer descanso: Turismo y cooperación internacional
La Secretaría de Turismo local informó que la capital cerrará 2025 con cifras históricas: 60.5 millones de visitantes, de los cuales 15.5 millones se hospedaron en hoteles, con una ocupación promedio de 67 por ciento. La derrama económica del turismo aumentó 17 por ciento respecto al año anterior.
La titular del ramo, Alejandra Frausto Guerrero, detalló que “quienes nos visiten se vayan como embajadores de nuestra ciudad”, y aseguró que todas las dependencias trabajan coordinadamente para garantizar una experiencia segura y positiva durante el Mundial.
En materia de cooperación internacional, el Gobierno de la Ciudad de México establecerá un diálogo con las demás urbes sede —en Estados Unidos y Canadá— para compartir estrategias de seguridad, movilidad y logística. Un encuentro entre los mandatarios locales se realizará entre diciembre y enero, tras el sorteo de grupos que la FIFA celebrará el 5 de diciembre en Washington.
Durante esa reunión, se prevé consolidar acuerdos sobre buenas prácticas y coordinación entre gobiernos locales. La jefa de Gobierno adelantó que la FIFA apoyará estos trabajos con una visión global, mientras que cada ciudad fortalecerá la operación local de la Copa del Mundo.
A México se espera que arriben más de cinco millones de visitantes durante el torneo, la mayoría a través de los aeropuertos de la capital. En este contexto, la Ciudad de México no solo busca ser una sede deportiva, sino también cultural y social.
“Queremos un Mundial con derechos plenos; en una ciudad de libertades, sin homofobia ni racismo, feminista, fraterna y vibrante”, concluyó Brugada.
El gobierno capitalino prevé que los preparativos de infraestructura, seguridad y promoción cultural se informen semanalmente en conferencias de prensa hasta junio de 2026, con el objetivo de que la capital mexicana, tricampeona mundialista, se consolide como la mejor sede del próximo Mundial.