El desabasto del medicamento metotrexato, para niños con cáncer, en el Hospital Infantil de México Dr. Federico Gómez, ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad que existe en la administración de la salud pública; existen grandes fallas en la regulación sanitaria y en el suministro y planeación de los medicamentos.

El martes 27 de agosto, la Secretaría de Salud mostró insensibilidad y falta de conocimiento sobre el uso de quimioterapias. Luego recapacitó. El jueves 29 de agosto se reunió con los padres de la familia y ofreció disculpas. Además se comprometió a garantizar el abasto del medicamento.

El comisionado federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), José Novelo Baeza, no ha dado la cara. La titular de la Comisión de Autorización Sanitaria, Elvira Espinosa, salió a explicar el problema y culpó a PiSA Farmacéutica del desabasto. A la Cofepris se la ha olvidado precisar que la planta no está cerrada, hay una “suspensión de actividades", únicamente, en la línea donde se manufactura el metotrexato.Novelo Baeza tuvo que nombrar como vocera a la funcionaria a pesar de que el responsable directo de la Operación Sanitaria es Alejandro Nieto, un académico con buenas credenciales académicas pero sin conocimiento técnico. Fuentes de la Cofepris aseguran que es un recomendado de  Carmen Giral, fundadora de la Asociación Farmacéutica Mexicana. También explicó que PiSA Farmacéutica no el único laboratorio que tiene licencias para importar la materia prima, producir y comercializar el metotrexato. La materia prima se trae de Asia y Europa, por lo que puede tardar meses en llegar a nuestro país. De acuerdo con diferentes industrias, los permisos de importación en la Cofepris se encuentran rezagados.

En el comunicado de prensa fechado al 27 de agosto, se informó que cinco farmacéuticas tienen permisos de importación de metotrexato vigentes hasta el año 2020  y representan, potencialmente, 35 millones de unidades. La cifra genera esperanzas fallidas. Las proyecciones del organismo regulador son arriesgadas porque se presume un desabasto mundial del medicamento. En este caso sólo se ha señalado a una empresa farmacéutica como la responsable del problema y las cuatro restantes ni siquiera se mencionan; además, hay que tomar en cuenta que la planeación del suministro de los fármacos es responsabilidad de la Secretaría de Salud.

De acuerdo con información de Registros Sanitarios en el sitio web de la Cofepris aparecen ocho razones sociales con 13 registros para el metotrexato: tres registros para la compañía Lemery; dos registros para Laboratorios Columbia, Zurich Pharma y Laboratorios PiSA, así como un registro, para Asofarma, Merck, Fresenius Kabi México y Pfizer. La Cofepris de Novelo Baeza y la comisionada Elvira Espinosa tienen cuentas no muy claras. Las 17 mil piezas de metotrexato entregadas al sector salud son tan sólo un paliativo. Ese inventario durará poco más de un mes, deseamos, por el bien de los pacientes, que el Secretario de Salud, Jorge Alcocer, logre ubicar y exportar por lo menos una cuarta parte de las 35 millones de unidades que según Cofepris están en el mercado.juliobrito@cronica.com.mx
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