El próximo 10 de junio se dará a conocer el resultado de la primera licitación centralizada del gobierno de Andrés  López Obrador. Las un mil claves de esta próxima compra serán adquiridas por el gobierno federal, bajo el modelo de transferencia en especie para el IMSS/Bienestar, antes Seguro Popular.

Después de un evento mal organizado para abrir el diálogo sobre esta próxima licitación, únicamente 16 asociaciones se mostraron interesadas en participar en la compra consolidada (nueve mexicanas y seis extranjeras); sin embargo, este modelo no resulta una innovación o una verdadera estrategia para reducir el robo de medicamentos.

Desde 2013, el gobierno federal y los gobiernos estatales se adhirieron al modelo de compra consolidada impulsado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que lleva el mexicano José Ángel Gurría. Este modelo  reduce costos al sector salud y está abierto a participantes internacionales debido a temas de patentes y mejores ofertas, como lo muestran Alemania y Estados Unidos, donde hay una efectiva competencia y ahorros significativos para los gobiernos

En esto países desarrollados la distribución de medicamentos se concentra en un máximo de seis empresas con capacidad para producir y distribuir a nivel nacional.

Si la Secretaría de Hacienda, que dirige Carlos Urzúa  busca reducir costos, no están haciendo nada diferente a las administraciones pasadas; únicamente contar con el lema “cero corrupción". Si lo que busca es eliminar la concentración de empresas en el abasto, el esfuerzo también resulta en vano.

La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) es la agencia que regula la producción, importación y distribución de medicamentos. Debido a sus prácticas regulatorias, la Organización Panamericana de Salud (OPS) la ha listado como líder en la región América; a la par de la agencia norteamericana, la Food and Drug Administration: Administración de Medicamentos y Alimentos o Administración de Alimentos y Medicamento- FDA.

En el caso de la FDA, es incluso ilegal importar medicamentos que no tengan un registro válido en Estados Unidos; esto a nivel de la empresa, suministros, plantas de producción, infraestructura de distribución y/o producto terminado. La Cofepris impone similares restricciones. El modelo que propone la SHCP no ataca, en lo más mínimo, ni el robo de medicamentos ni la concentración en pocas empresas.

INVERSIONES. Grupo Altavista, de Ricardo Orrantia, anunció que para 2019 la cifra de inversión en capacitación y desarrollo para sus más de 750 empleados alcanzará los 950 dólares en promedio por persona; es decir, una cifra por arriba incluso de los 936 dólares que las empresas norteamericanas promediaron el año anterior; esto según los datos del prestigiado 2018 Training Industry Report.ALIANZA. La firma israelí Kaiima Bio Agritech, que dirige Mark Chess, y la mexicana Biofields, que encabeza Roberto Giesemann, se unieron con el objetivo de desarrollar, producir y comercializar semillas híbridas de higuerilla en México, bajo el nombre de BioKaiima. Ésta es una planta oleaginosa que es factor fundamental para la agricultura energética; presenta capacidad de adaptación porque no requiere sembrarse en tierra fértil y puede ser regada con aguas residuales.juliobrito@cronica.com.mx
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