A partir del 1 de enero de 2020, las bebidas saborizadas deberán tener un ajuste dentro de la Ley del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) para pasar del actual impuesto de 1.17 pesos por litro a 2 pesos, de acuerdo con una iniciativa de Morena en la Cámara de Diputados, o un incremento de 1.27 pesos por litro como lo propone el Jefe del Ejecutivo.

Ayer se llevó a cabo el “Análisis de Sobrepeso y Obesidad” en San Lázaro, donde el diputado morenista Manuel Huerta Martínez presentó ante expertos en Salud y del sector de la industria de las bebidas saborizadas su iniciativa que eleva en 2 pesos el impuesto por litro de estos productos.  “Tratándose de refrescos, concentrados, polvos, jarabes, esencias o extractos de sabores, el impuesto se calculará tomando en cuenta el número de litros de bebidas saborizadas que, de conformidad con las especificaciones del fabricante, con lo cual se pueda obtener una recaudación anual que rondaría los 50 mil millones de pesos”.

Los recursos recaudados —aclaró el legislador— deberán destinarse al (próximo) Instituto Nacional de Salud para el Bienestar, en fomento de las acciones que el Estado mexicano implemente para combatir la obesidad y sobrepeso de las niñas, niños y adolescentes en el país, sin perjuicio de la aplicación previa de las disposiciones en materia de coordinación fiscal.

México se encuentra en una emergencia en el combate a la obesidad y el sobrepeso, donde lo más lamentable es que se tiene el primer lugar en el mundo en que estos padecimientos son cosas de niños.

“Ya tenemos la primera generación de padres de familia que verán morir a sus niños por estas enfermedades”, alertó Alejandro Calvillo, del Poder del Consumidor, que recomendó ver el documental Dulce Agonía, en el que se retrata cómo las empresas fabricantes de bebidas saborizadas tienen presencia en las comunidades más apartadas y pobres de México.

“Están los estudios, está la evidencia de la crisis por la que atraviesa el país en la reducción del consumo de la chatarra”, dijo el experto, a la vez que pidió que de aplicarse este ajuste de 2 pesos, los recursos deberían destinarse a la mejora de la infraestructura para garantizar que haya agua potable, agua para beber en los municipios más pobres.

Otros expertos señalaron que “la gente no debe morir, parece que estamos en guerra ante la cantidad de personas que están falleciendo en nuestro país”, coincidieron expertos en salud pública y funcionarios del gobierno federal en el sector al exponer la urgencia de actualizar el IEPS.