En Iztapalapa, las personas que hayan padecido COVID-19 y tengan como secuela problemas respiratorios podrán recibir terapia de rehabilitación pulmonar en la Casa de la Salud Cocoxcalli, que puso en marcha la alcaldesa Clara Brugada.

En la apertura de la casa de la salud, ubicada en Barrio San Ignacio, Clara Brugada resaltó que en Iztapalapa hay más de 78 mil habitantes que se recuperaron de COVID19; sin embargo, muchos de ellos permanecen con secuelas derivadas del padecimiento, como falta de aire al subir escaleras, realizar algún esfuerzo o labores que antes de estar enfermos hacían sin dificultades.

Este servicio está dirigido a pacientes que estuvieron infectados de COVID-19 y desarrollaron síntomas leves y moderados de esta enfermedad en quienes es necesario tratar las secuelas, es decir, el llamado síndrome post COVI-19, como es la falta de aire, conocido como disnea, en el que las personas ya no tienen la misma capacidad respiratoria y ya no pueden llevar a cabo la misma actividad física.

La terapia se lleva a cabo con ejercicios de respiración que los pacientes pueden realizar sentados o acostados, según la rutina que se aplique; se mueven diversos músculos, los brazos y no es complicado, al tiempo que puede generar importantes beneficios a la salud de las personas que padecieron COVID-19.

Clara Brugada subrayó que este es el primer espacio de rehabilitación pulmonar en Iztapalapa, por lo que reiteró la convocatoria a las personas que tienen secuelas de COVID-19 a acudir a la Cocoxcalli y afirmó que son ejercicios muy sencillos pero se debe tener disciplina para realizarlos todos los días y alcanzar una mejoría.

En este espacio también se ofrece consulta médica general, odontológica, terapia psicológica y actividades como taichí. Además, se abrió en este recinto un Centro Colibrí para atención de las adicciones.