El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, decidió ayer relevar al director en funciones de Inteligencia Nacional, Joseph Maguire, después de que la semana pasada una alto cargo del departamento aseguró en una reunión a puerta cerrada con el Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, que Rusia está ya interfiriendo de nuevo en el proceso electoral de EU.

Según un reporte del diario ‘The New York Times’, Shelby Pierson, responsable de la seguridad electoral de EU, se reunió con los congresistas del comité, que lidera el demócrata Adam Schiff, uno de los principales críticos del presidente y líder del fracasado impeachment en su contra.

En este encuentro confidencial, Pierson aseguró a los legisladores que la comunidad de Inteligencia de EU, en sus diversas agencias, está convencida de que Rusia está teniendo a estas alturas el mismo comportamiento que tuvo en 2016, y que desató la investigación de la llamada trama rusa, contra el círculo personal y político de Trump.

Según fuentes citadas por el ‘NYT’, el reporte de Pierson mencionó ataques informáticos procedentes de Moscú, ataques en redes sociales, igual que en 2016, y ataques contra la infraestructura electoral de EU.

El diario agrega que Inteligencia Nacional cree que el objetivo principal de estos ataques es ayudar a Trump a lograr la reelección, pero también poner en entredicho la integridad de proceso electoral.

DETONANTE DEL DESPIDO. La reunión provocó la ira de Trump, quien culpó a Maguire por permitir que las informaciones sobre la nueva interferencia de Rusia llegaran a oídos de los legisladores demócratas, pues percibe que Schiff aprovechará esto para atacarlo, según aseguró la CNN citando fuentes conocedoras de la situación.

Este episodio fue determinante para que Trump tomara la decisión de prescindir ayer de Maguire, quien ocupaba el cargo interinamente desde la salida de Dan Coats de Inteligencia Nacional el pasado año, precisamente por desencuentros con el presidente. De todos modos, la relación entre Trump y Maguire no era fluida desde antes de que ocurriera esto, citan medios de EU.

REEMPLAZO CUESTIONABLE. La elección de Rick Grenell como nuevo director interino de Inteligencia Nacional responde al deseo de Trump de contar, finalmente, con un fiel seguidor en el cargo. Grenell, que desde 2018 ocupaba el cargo de embajador de Estados Unidos en Alemania, cumple este perfil, pues ha sido un activo defensor del mandatario.

Sin embargo, la oposición demócrata ha señalado que el elegido, que será el primer miembro del gobierno de Trump abiertamente gay, no cumple con el perfil para el puesto, pues no cuenta con ninguna experiencia en Inteligencia.

DAN 3 AÑOS Y 4 MESES DE CÁRCEL A ROGER STONE. Roger Stone, fiel colaborador de Donald Trump, fue condenado ayer a 3 años y 4 meses de cárcel en medio de una polémica por las interferencias del mandatario en el proceso judicial y su posible indulto.

El exasesor, de 67 años, fue condenado tras haber sido declarado previamente culpable de siete cargos relacionados con la llamada trama rusa: cinco de falso testimonio, uno de obstrucción del proceso judicial y otro de manipulación de testigos.

Stone es un veterano asesor político republicano que ha mostrado a lo largo del juicio su peculiar gusto por la provocación y uno de cuyos lemas favoritos es “No admitas nada, niégalo todo y lanza un contraataque”.

La polémica política viene porque la fiscalía pensaba pedir entre 7 y 9 años de cárcel para Stone; sin embargo, el presidente Trump exigió públicamente rebajar la petición, tesis a la que se adhirió luego el fiscal general William Barr.

Por si esto fuera poco, poco después de conocerse la sentencia, Trump comentó la decisión asegurando que “Roger tiene una buena oportunidad de ser exonerado”.

Stone se convierte así en el sexto asesor o colaborador cercano de Trump que es condenado o se declara culpable ante la Justicia.