Papel picado, incienso y ofrendas prehispánicas, destacaron durante el recorrido que realizó la procesión de animeros de San Juan Tlihuaca y la visita al panteón del pueblo, como una tradición en Azcapotzalco que data desde hace más de 200 años durante el Día de Muertos para recordar a los seres queridos. A través de un recorrido que inició por la gran ofrenda instalada en el patio de la iglesia San Juan Bautista, que trató de la historia prehispánica de las 13 grandes ciudades y su combinación con la evangelización realizada por los conquistadores; mostraron vestigios de la zona como artículos de obsidiana, cerámica, códices y escudos de guerra, pertenecientes a las culturas tepaneca, náhuatl, maya, mexica y olmeca, entre otras; así como sus alimentos básicos: maíz, frijol y chile. Posteriormente se realizó la peregrinación desde la iglesia hacia el antiguo Panteón de San Juan Tlihuaca, acompañada por los animeros del pueblo, los cuales con cantos y rezos, caminaban por las calles del pueblo invitando a los vecinos a abrir sus puertas y así compartir una oración a los muertos. En las entradas de las casas se instalaron ofrendas con mensajes de despedida a personajes públicos y celebridades fallecidas como José Emilio Pacheco, Octavio Paz, María Eugenia Llamas La Tucita, Gustavo Cerati, Oscar de la Renta y el actor Robin Williams.

El recorrido terminó con la llegada al Antiguo Panteón de San Juan Tlihuaca, el cual se encontraba muy colorido por las tumbas adornadas con globos, juguetes, flores, retratos, inciensos y velas, utilizadas para alumbrar el camino de las personas que yacen en este lugar y a quienes posteriormente se les rezó el rosario nocturno.