El gobierno interino de Bolivia presentó este jueves una “protesta formal” a México por un video en el que supuestamente Evo Morales, desde su asilo en el país, “conspira” contra el ejecutivo que preside la ultracatólica Jeanine Áñez.

El video, difundido el miércoles por la cancillería boliviana, incluye una voz atribuida a Morales en la que, según la versión del cuerpo diplomático del país andino, el presidente depuesto da instrucciones a líderes cocaleros en Bolivia para bloquear accesos a ciudades e impedir el suministro de alimentos y carburante.

“Las manifestaciones y actos efectuados por el señor Evo Morales contravienen su condición de asilado político”, advirtió la secretaría de Relaciones Exteriores de Bolivia en un comunicado. “Morales incita a la violencia desde México, lo que atenta contra la estabilidad del gobierno constitucional, la paz social y los derechos humanos del pueblo boliviano”, agregó la cancillería.

El gobierno de Áñez expresó “su profunda molestia” al Ejecutivo de Andrés Manuel López Obrador por “la violación de los principios que rigen la institución de asilo político”, según la cancillería.

La secretaria interina de Relaciones Exteriores de Bolivia, Karen Longaric, declaró a los medios que la nota de protesta iba a ser entregada a la embajadora de México en La Paz, María Teresa Mercado.

RECHAZO. Entre tanto, Morales aseguró este jueves que la acusación del ejecutivo de Áñez es un “montaje”, que tiene la “intención de hacerme un juicio internacional”. “Apelar a la manipulación judicial para encarcelar a líderes antimperialistas, de izquierda y progresistas es algo que ya hicieron con Lula, Cristina y Correa”, sentenció el presidente depuesto en Twitter.

“Los que tienen que estar preocupados por la Corte Penal Internacional son Áñez y (el secretario interino de Gobierno Arturo) Murillo, por los crímenes de lesa humanidad que están cometiendo al ordenar a los militares a asesinar a mis hermanas y hermanos, tratando de cubrir estos delitos con un decreto ilegal”, añadió Morales.