Opinión

Corred como potros salvajes

Corred como potros salvajes

Corred como potros salvajes

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Ojalá la metáfora implícita en el texto aludiera al espacio y a la sensación de bienestar que causa correr con brío sobre espacios amables o de plano imbuirnos en praderas como en las que vagan los mustangs en reservas, supongo, cada vez más acotadas. Temo decepcionarlos, pero por ahí no va mi inquietud. Hoy amanecí con espíritu de aguafiestas. De tal suerte que el enunciado más exacto, imbuido de actualidad, debió parecerse más al título de una tesis de administración pública escrita por el hijo de un caporal: Deambulad como caballos de rancho, mientras entendemos qué parte de nuestra vida, nuestro trabajo y nuestro país queremos cambiar y cómo vamos a hacerlo desde nuestras competencias profesionales: la individual y la social. La conclusión de semejante mamotreto podría ser: Una vez comprendida esa etapa, quizá podamos correr, si no como potros sin brida, sí cuando menos trotar con certeza.

Lo anterior abarca desde la ventanilla 01 de cualquier dependencia del gobierno federal o estatal, incluidos los organismos que dependen del financiamiento público, hasta los integrantes que se avientan las juntas del gabinete. Sería interesante que alguna vez el machuchón de Palacio Nacional transmitiera en vivo una de las juntas con lxs machuchonxs de su gabinete. Lo más cercano que he leído de las mismas, aunque tampoco me he clavado mucho en esa textura, es una recreación de mala sangre del cuñado de Felipe Calderón; malasangre como el propio expresidente, que vive de la vanidad comprada primero en urnas y ahora en redes, como la de muchos otros falsos narcisos que recrean imágenes distorsionadas de sí mismos en donde sólo hay cuencos de tierra agrietada.

Una serie de preguntas que recientemente me asalta sin quitarme el sueño todavía cada vez que veo potros deambular sin rumbo es: ¿Cómo son esas reuniones? ¿Relajadas? ¿Tensas? ¿Claras? ¿Son juntas en las que se reparten estrellitas y se ponen taches de Señorita Cometa? ¿Hay autocrítica, incluida sobre todo la proveniente del machuchón juarista-luzmundista? ¿Lo interpelan sus colegas o guardan cobarde o prudente sumisión cuando es necesario debatir cómo aterrizar la 4T con los recursos humanos y fiscales disponibles en un país ­pluriétnico y de saberes y procedimientos eficaces pero diversificados?

A pesar de un panorama adverso, sobre todo después de las amenazas de Trump y de una oposición destructiva y un empresariado nacional (no todo, pero sí el que se nos presentaba como modelo) arribista, doble cara y con mentalidad abarrotera, la 4T no genera anticuerpos, corre a lo pendejo. En lugar de encauzar la energía con más tino, desperdicia el capital social con el que cuenta o lo quiere monetizar con becas para asegurar el voto sin cuestionamientos. Así como hay poblaciones empleadas en construir caminos de cemento y armado de varillas sin necesidad de grandes contratistas e intermediarios, existen muchas otras actividades en las que es necesaria la efectiva reingeniería de procesos que, sin perder la directriz, permita el crecimiento razonable más allá del delirio de la aceleración.

Carl Honoré, cuya lectura no le vendría mal al Presidente, lo expresa así: “Si nos volvemos menos neuróticos acerca del tiempo, podremos sentar las bases para que la sociedad, activa durante las veinticuatro horas, viva de una manera más juiciosa.”

Pasar del modo rápido al modo súperrápido sin planeación mediante es, incluso en términos cuantitativos, menos productivo si no hay tiempo para el respiro o si sobre la marcha se va parchando e improvisando.

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Letras al pie

Natalia Pájaro

No conocía la obra de esta artista plástica hasta que vi colgado uno de sus cuadros en las paredes de ese espacio generoso, arbolado y lleno de vida por el que fluyen las actividades de la Casa Xitla. El óleo “Tu manto”, del que me hice propietario, motivó mi curiosidad por el trabajo de esta pintora, variado en técnicas y temas, pero de extraordinaria ejecución.

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