Metrópoli

Crónicas de pandemia: Viajar en el metro no volverá a ser lo mismo

En las arterias que dan vida a las 14 líneas del Metro, incluidas las A y B, los usuarios han presenciado sucesos trágicos e impactantes, desde tiroteos, inundaciones, descarrilamientos y suicidios

Crónicas de pandemia: Viajar en el metro no volverá a ser lo mismo

Crónicas de pandemia: Viajar en el metro no volverá a ser lo mismo

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Luego del trágico accidente registrado la noche de ayer lunes, cuando dos vagones del Metro de la Línea 12 se desplomaron al colapsar una de las estructuras metálicas y concreto que los soportaban, lo que dejó más de una veintena de muertos y más de 70 heridos, usuarios del Sistema de Transporte Colectivo (STC) entrevistados por Crónica han expresado su preocupación ante la posibilidad de que una tragedia similar vuelva a ocurrir.

En las arterias que dan vida a las 14 líneas del Metro, incluidas las A y B, los usuarios han presenciado sucesos trágicos e impactantes, desde tiroteos, inundaciones, descarrilamientos y suicidios.

Usuarios del Metro, haciendo a un lado temores por vivencias inesperadas y trágicas, consideran que episodios como el ocurrido la noche del lunes en la Línea Dorada no dejarán de ocurrir, ya sea por negligencia o por algún accidente, y es que la necesidad de llegar a algún destino hace olvidar el temor a cualquier riesgo.

“Como mujer viajar en el Metro no es sencillo, tenemos que lidiar con el acoso por parte de algunos pasajeros, la inseguridad dentro de las instalaciones ha ido aumentando y la falta de mantenimiento complica más las cosas”, comenta Andrea Parra, una estudiante de Ingeniería en la UNAM.

Como vecina de la alcaldía Azcapotzalco, la joven dice que el Metro es su principal medio de transporte y desde la llegada de la pandemia de COVID-19 ha tenido que cambiar la forma de viajar dentro de las instalaciones del Metro.

“Careta, cubrebocas, gel antibacterial e incluso toallas desinfectantes, son las cosas que no pueden faltar a la hora de viajar, es difícil ver cómo la gente hace caso omiso a las constantes recomendaciones, pues no son capaces a veces de respetar la sana distancia”.

La joven ingeniera dice que tras lo ocurrido en la Línea 12, muchos de los usuarios ya no tendrán la misma confianza cuando utilicen este transporte y en esa línea.

Crónica realizó un recorrido por diversas estaciones del Metro y constató que la afluencia de viajeros es constante, a pesar del accidente en la Línea Dorada.

David es un vecino de San Cristóbal, en Ecatepec, y cuenta que a pesar de lo ocurrido en la L12 es imposible no utilizar el Metro, ya que por su bajo costo y su amplia cobertura en traslados, seguirá siendo la primera alternativa de movilidad para mucha gente.

“No es la primera vez que estas cosas pasan y dudo mucho que sea la última, ya que la necesidad nos obliga a tomar el riesgo, no es lo mismo pagar 5 pesos para ir de Indios Verdes hasta el Auditorio, que contratar el servicio de un Uber, ni que fuera fifi”, señala entre risas.

Asimismo, este joven dice que además del Metro, el servicio del Metrobús es otra de las alternativas para llegar al centro de la Ciudad de México, pero criticó que es más lento que el Metro, por lo que no es una opción cuando se tiene prisa.

La misma opinión la comparte Raquel, una joven madre de 2 hijos, quien asegura que a pesar de los accidentes e inconvenientes que nunca faltan, ella está obligada a seguir utilizando el Metro, “pues no hay otra forma de llegar a su trabajo”.

Raquel comenta que todos los días tiene que tomar en punto de las 6 de la mañana el convoy en la estación Barranca del Muerto, de la línea naranja, para dirigirse a la estación Atlalilco en la Línea 12, pero ahora con la tragedia modificará su ruta.

“Todos los días tomo una combi que me lleva hasta el Metro, ahí empieza mi recorrido, pero debido a lo sucedido ayer, tendré que buscar otra alternativa para llegar, lo que implica más tiempo y gasto”.

La joven señala que uno de sus principales problemas al viajar en el Metro es que no se aplican con seriedad los protocolos contra la COVID, ya que la sana distancia y el uso correcto del cubrebocas es algo que muy pocos usuarios aplican.

“Antes sólo me tenía que preocupar por llegar a tiempo a mi trabajo, ahora cargo con el temor de no contagiarme de COVID durante mi traslado, por lo que no sabría qué hacer si por mi culpa mis hijas se contagiaran”.

La forma de traslado en el Metro se ha modificado, ahora los usuarios se tienen que adaptar a esta nueva normalidad, en donde los empujones, los altercados, la ausencia de la sana distancia y las constantes aglomeraciones son el pan de cada día de esta nueva rutina.