La Casa de Paso de la Divina Providencia, ubicada en una zona residencial de Villa del Rosario, municipio del área metropolitana de Cúcuta, se ha convertido en un punto de referencia para más de 4 mil venezolanos, que cada día cruzan la frontera con Colombia para almorzar allí.

Arroz, frijoles, lentejas, carne desmenuzada o yuca son algunos de los alimentos que brinda de lunes a sábado este servicio de beneficencia, ubicado a menos de un kilómetro del puente fronterizo Simón Bolívar. Una comida que, en muchos casos, es la única del día para estos venezolanos.

Las larguísimas filas alcanzan cada mañana un parque situado a dos cuadras del lugar, donde la población espera bajo el fuerte sol. Entre los comensales hay tanto niños como adultos, jóvenes y mayores, que tratan también de llevarse un itacate para sus familias.

Carlos Rodríguez cuenta que desde hace cuatro meses camina a diario desde su natal San Antonio del Táchira hasta Cúcuta para almorzar, mientras Nelly Amparo García asegura que la media hora de camino que hace hasta allí vale la pena, porque esa comida le sabe a manjar. “Hoy nos dieron unas lentejas bien buenas; el comedor es muy bonito y dan muy buena atención; todo está limpiecito”, asegura Nelly.