Una jueza federal falló este viernes que el departamento de Justicia de EU está obligado a entregar todas las evidencias encontradas en las investigaciones del gran jurado del exfiscal especial Robert Mueller respecto a la trama rusa al Comité Judicial de la Cámara baja.

Esto, en relación con los esfuerzos de los demócratas para preparar el impeachment contra el presidente Donald Trump, que además de la trama ucraniana, podrían incluir las posibles evidencias sobre obstrucción a la justicia del mandatario durante las pesquisas del Rusiagate.

La magistrada Beryl Howell, la jueza federal en jefe de Washington D.C., escribió en su fallo que las investigaciones de los demócratas para el juicio político a Trump tienen validez judicial incluso si el Congreso aún no ha votado abrir formalmente el proceso.

De esta manera, descartó el argumento que esgrimía la Casa Blanca en el caso, que aseguraba que un voto formal previo es imprescindible para considerar válidas las investigaciones del impeachment.

“Incluso en casos de impeachment presidencial, una votación de la Cámara de Representantes nunca ha sido requerida para iniciar una investigación por juicio político”, escribió Howell.

Por ello, la magistrada ordenó al departamento de Justicia que entregue, antes del 30 de octubre, “todas las porciones del Informe del Fiscal Especial Robert S. Mueller III sobre la investigación referida a las interferencias rusas en las elecciones presidenciales de 2016 que fueron censuradas” debido a las restricciones de las audiencias a puerta cerradas que formaron parte de la pesquisa.

Adicionalmente, Howell exige que el fiscal general William Barr entregue “cualquier transcripción o material al que se haga referencia en los fragmentos censurados del Informe de Robert Mueller”.

TRIUNFO PARA PELOSI. Este fallo supone una gran victoria para la líder demócrata y presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi, que argumentaba junto a sus compañeros que necesitaban poder ver estos fragmentos censurados para poder determinar si deben o no presentar los cargos de obstrucción a la Justicia relacionados con la trama rusa.

Además, los demócratas ven ahora cómo Howell les da la razón respecto a que sus procedimientos previos al impeachment constituyen en sí mismos un proceso “judicial”. Este argumento se basa en el hecho de que quien preside una eventual votación en el Senado para decidir si se expulsa o no al presidente de su cargo es el presidente del Tribunal Supremo del país.

ADVERTENCIA. Para culminar, la jueza Howell advirtió en su fallo que la doctrina del departamento de Justicia que indica que los presidentes en el cargo no pueden ser juzgados, “nunca se ha adoptado, firmado o aprobado por un tribunal”.