Una primera batalla ha ganado Morena en su disputa con el INE, el órgano electoral que detectó actividades de precampaña en las que no hubo los reportes de gastos que exige la Ley. El Tribunal Electoral, con serias divisiones entre los magistrados que conforman su Sala Superior, se mostró conforme con la actitud fiscalizadora del Instituto Electoral, pero no así con lo que se denominó sanciones mecánicas que siempre conducían a la máxima pena posible, el retiro de la candidatura.

Raúl Morón, el candidato morenista a la gubernatura de Michoacán, es el caso más claro de lo dicho, pues sí realizó su informe, pero su partido lo entregó a destiempo. "El incumplimiento (a destiempo) debe ser sancionado", señaló el presidente del Tribunal Electoral del Poder Juidicial de la Federación, José Luis Vargas, pero la sanción debe ser proporcional, no la máxima.

Los candidatos son responsables ante los partidos y el partido ante la autoridad electoral, señaló Vargas, así que ambos son sancionables, pero sin violentar los derechos de quienes se postulan a un cargo de elección popular.

"Los candidatos deben ser oidos", antes de la sanción, refirió.

Hay 17 precandidatos de Morena que están en esta situación, en todos los casos fue el partido fue el responsable del retraso.

Al INE debería establecer una sanción "proporcional" en una sesión extraordinaria el lunes. La pelota está en su cancha nuevamente,

La sesión del Tribunal continúa. El caso Salgado Macedonio, aun está por definirse.