Opinión

El destino de Cancún

El destino de Cancún

El destino de Cancún

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Pocos lugares en el mundo resultan ser tan apasionantes en su análisis como modelos de desarrollo urbano y turístico como lo es Cancún. Este destino turístico se ha consolidado como uno de los preferidos por millones de viajeros que año con año arriban a él.

Cancún es la cabecera municipal del Municipio Benito Juárez en el Estado de Quintana Roo,  su desarrollo estuvo a cargo del Fonatur a partir del año 1974, y lo que era una zona de pescadores que convivían con la selva se convirtió, a lo largo del tiempo, en uno de los lugares de mayor crecimiento poblacional anualmente en el país, de acuerdo al censo de Inegi 2015 cuenta con una población de 743,626, sin embargo, de acuerdo a las estimaciones de las autoridades municipales tiene un crecimiento poblacional cercano al 12% anual.

Un destino que en su origen fue planeado para albergar 6,000 cuartos de hotel y hoy ha rebasado los 35,000. La infraestructura y el presupuesto del municipio para dotar de los servicios que corresponden a los miles de trabajadores, prestadores de servicios y más gente que ha arribado a vivir a Cancún son insuficientes. Esto se ve reflejado en el creciente tráfico, invasiones en ciertas colonias de las periferias de la ciudad y titánicos esfuerzos para el manejo de la basura y tratamiento de aguas residuales.

Aunado a lo anterior, el crecimiento que presenta la región se está convirtiendo en señal de alerta para los tres órdenes de gobierno, sirva tan sólo de ejemplo el caso de la parte continental del municipio de Isla Mujeres, una delgada franja de territorio que administrativamente depende de la isla pero que tiene una mucho mayor interacción y dependencia con la dinámica de Cancún por su cercanía y donde se tiene prevista la construcción (ya habiendo pasado todos los filtros legales para su autorización) de otros 25,000 cuartos de hotel más, lo equivalente a la construcción de dos “los cabos”.

Sin duda una importante inversión para la región pero que en gran medida ha soslayado los aspectos preventivos que se requieren.

Todo este desarrollo podría atraer cerca de 50,000 trabajadores más que seguramente vivirán en las periferias de Cancún, donde la carencia de vivienda es una realidad que aún no tiene una solución para los muchos trabajadores que ya allí viven, aunado a ello, será el municipio de Benito Juarez el que tendrá que dotar principalmente de servicios a esta zona, como lo es la accesibilidad, la comunicación y el manejo de basura en un relleno sanitario inter-municipal.

Esta realidad, si bien habla de la confianza que los inversionistas tienen en esta región, demanda a la vez la necesidad de un trabajo coordinado de varias instancias de gobierno, de los tres órdenes, el sector privado y la sociedad civil para que se tomen las medidas necesarias que prevengan un futuro inmediato que inminentemente se convertiría en un riesgo para la población, los turistas, el medio ambiente y las inversiones, si no se hacen las cosas “a tiempo”.

Afortunadamente, en este momento ya se están llevando a cabo medidas preventivas, por ejemplo, el congreso del Estado de Quintana Roo prohibió el uso de plásticos y se hará válida a partir del primer día de enero del 2020; a su vez la secretaría de Turismo del Gobierno de México ha comenzado acciones para acercar medidas de sustentabilidad turística a Cancún, sin embargo, falta mucho trabajo por hacer, ya que esta ciudad se encuentra en un momento crítico en el que se está definiendo si logra reposicionarse como el destino preferido de México y si por la falta de una adecuada planeación se condena a sí mismo a sus ruinas. Hago los mayores votos para que con una buena coordinación, Cancún renazca en todo su esplendor.

madrugacesardaniel@gmail.com