Un total de 128 mujeres —entre los 30 y 40 años de edad— que han sufrido violencia son las primeras en portar los geolocalizadores que la Procuraduría General de Justicia de la capital repartió para prevenir feminicidios.

Nelly Montealegre Díaz, subprocuradora de Atención a Víctimas del Delito de la procuraduría capitalina, detalló que la mayoría de estas mujeres han sido agredidas por sus parejas sentimentales.

“Son víctimas de violencia familiar principalmente, de pareja. En estos casos, los agresores tienen control del tiempo de la persona, de su celular,… la sigue, la espía, le hace llamadas constantes, le deja mensajes amenazantes”, enumeró.

Además, en algunos casos las mujeres han sido amenazadas con armas blancas y de fuego.

El uso de este GPS no tiene una fecha de caducidad, pero antes de usarse formalmente las mujeres que lo recibirán deben firmar una carta en la que se comprometan a cuidarlo y no dejarlo a cargo de otras personas.

Este dispositivo tiene dos botones, el primero sirve para activar una alerta que será recibida por los trabajadores del C5, y el segundo botón funciona para llamar directamente a un contacto de emergencia, puede ser desde un familiar o un conocido de confianza.

Una vez que es accionado, vibra y enciende una luz verde como señal de que la Policía ya tomó conocimiento de que la mujer necesita ayuda inmediata. Es entonces cuando se manda una patrulla del cuadrante para auxiliarla y hacer la detención o contención necesarias.

La procuradora de la ciudad, Ernestina Godoy, detalló que de enero de 2012 a septiembre de 2017 se registraron 292 casos de feminicidios y 421 casos de homicidios dolosos contra mujeres, de acuerdo con datos del Gobierno capitalino.