Mundo

El gobierno de Castillo arranca con caos por nombrar a un primer ministro extremista

La irrupción del misógino y homofóbico Guido Bellido deja vacías carteras clave, como Economía, a la que renuncia el moderado Pedro Francke, que era el encargado de tranquilizar a las élites.

El gobierno de Castillo arranca con caos por nombrar a un primer ministro extremista

El gobierno de Castillo arranca con caos por nombrar a un primer ministro extremista

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Era casi medianoche y las cámaras de televisión reunidas en el Gran Teatro Nacional de Lima llevaban más de tres horas esperando este jueves a que apareciera el nuevo presidente de Perú, el izquierdista Pedro Castillo, junto a sus flamantes secretarios de gobierno para que estos juraran el cargo.

Tres horas más tarde de lo previsto, que era a las ocho y media, los secretarios aparecieron y juraron el cargo ante una biblia y un crucifijo, pero faltaban dos: Los cargos de Justicia y Economía, dos de las carteras más importantes en cualquier gobierno.

Detrás de este suspenso se encuentran los estragos que ha provocado en el equipo del nuevo mandatario el nombramiento del radical Guido Bellido como primer ministro, una decisión que había llegado horas antes, el mismo jueves, un día después de que Castillo tomara posesión del cargo de presidente.

Bellido es un hombre que simpatiza con Sendero Luminoso, la organización terrorista –aunque él niega que lo fuera— marxista que aterrorizó Perú durante la década de los ochentas, y niega que el régimen castrista en Cuba sea una dictadura. Además, es conocido por su misoginia y homofobia, que escupe con frecuencia en redes sociales. El año pasado llamó a boicotear a Movistar por un comercial con una pareja gay: “No hace falta decir cómo podemos hacerle sentir nuestra molestia a esta compañía del lobby gay, mañana me corta su servicio”, escribió.

“LA MUJER ES DESTRUCTIVA Y DESPIADADA"

“El ‘hombre nuevo’ no puede ser un ‘maricón’. ‘La sociedad socialista no puede permitir este tipo de degeneraciones’, palabras de nuestro comandante líder cubano Fidel Castro en 1963”, escribía en otro post en Facebook. En 2018, tras el suicidio de un hombre que denunció que su mujer no le dejaba ver a sus hijos, escribió: “La mujer es tan destructiva y despiadada a la hora de mezclar sus rencores y egoísmo no veo ninguna lesbiana ni gay que organiza una movilización, si las cosas siguen como esta la violencia se va ascentuar cada día mas(SIC)”.

LA VICTORIA DEL RADICALISMO MARXISTA

Pero a efectos de los equilibrios de poder en el entorno de Castillo lo más importante no es la ignorancia de Bellido, sino su cercanía conocida a Vladimir Cerrón, el líder de Perú Libre, la formación socialista por la que se presentó a las elecciones el nuevo mandatario. Cerrón, de ideas de extrema izquierda similares a las de Bellido, ha generado terror en los sectores moderados, al punto que Castillo se vio obligado a aclarar que no tendría ningún rol en su gobierno.

Esto permitía que figuras como el reputado economista Pedro Francke ganara peso en el equipo del mandatario, y se ocupó de tratar de tranquilizar a las élites, asegurando que el gobierno no expropiaría empresas ni organizaría una economía estatal al estilo soviético, como en algún momento insinuó Castillo en campaña, como cuando aseguró que nacionalizaría las empresas mineras.

Sin embargo, ahora Francke se ha ido. Todo el mundo daba por hecho que sería secretario de Economía, pero la cartera está ahora vacía. También se han marchado dos de los principales asesores jurídicos de Castillo, Julio Arbizu y Ronald Gamarra, quienes dirigieron la defensa ante las infundadas acusaciones de fraude electoral de la perdedora de los comicios, Keiko Fujimori.

“PRIMER ERROR GRAVE"

En Twitter, Arbizu se despidió asegurando que este es el “primer error grave del gobierno”, y aseguró que Bellido “en lugar de afirmar alianzas y consensos conseguidos, los espanta”. Por su parte, Gamarra aseguró, según afirma el diario El País, que quería dejar “constancia” de su “alejamiento” de Castillo. “Nada con Cerrón, nada con Bellido”, sentenció a través de WhatsApp, dice el diario.

Con información de El País y El Comercio.