El retrato de la familia "Somos Diferente", una opinión de Arturo Ramos Ortiz
Y conste que no me meto con aquellos a los que llaman Trivagos, pero lo cierto es que ya comienza a quedar el retrato familiar de la 4T: un hermanito que rejunta dineros; una esposa que canta felizmente cuando no la sacan de sus casillas y contesta tosco en redes; una primita que le encanta tanto el mundo indígena que se disfraza para ser candidata y otra que renuncia a contratos con conflictos de interés hasta que es descubierta...
Pero también hay un retrato pensado in extenso, que incluye a los cercanos de la familia. El amigo guerrerense, por ejemplo, que además trajo a la hija, ambos merecedores de un lugar en esta imagen a plasmar de una época en la que el país se estaba transformando a marchas forzadas.
Por supuesto, el Partido, ese armatoste de unicel y chaquiritas, aparecerá como parte del escenario para la foto. ¿Que uno de los principios sobre los que se fundó el partido era evitar los groseros tráficos de poder entre familiares y allegados sin mucho mérito? ¡Por Dios! ¿Quién se va a fijar en eso?