El senador y exaspirante presidencial estadunidense Marco Rubio llegó ayer a la ciudad colombiana de Cúcuta para supervisar la ayuda humanitaria que se almacena en la frontera con Venezuela y que se espera sea enviada a partir del próximo sábado a ese país, como prometió el presidente interino Juan Guaidó.

“Llegué a Colombia esta mañana. Hoy llegará una gran cantidad de ayuda humanitaria para Venezuela. Me reuniré con los funcionarios, quienes lideran el esfuerzo de almacenar la ayuda en la frontera y prepararlo para entregarlo al pueblo sufriente de Venezuela”, informó Rubio en Twitter.

El senador republicano de origen cubano viajó con el embajador de EU ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), Carlos Trujillo, y el congresista republicano Mario Díaz-Balart, con quienes supervisará la ayuda humanitaria enviada por el país a través de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid).

Horas antes de la llegada de Rubio, tres aviones C-17 de la Fuerza Aérea de Estados Unidos llegaron al aeropuerto de Cúcuta cargados con toneladas de suplementos nutricionales y kits de higiene, que se suman a la ayuda humanitaria que ese país envío hace una semana.

Cúcuta, junto a Curazao y el estado brasileño de Roraima, son los puntos de acopio de las ayudas humanitarias, a los que se sumó el pasado viernes Miami.

“Narcotiranía”. “La narcotiranía de Nicolás Maduro continúa bloqueando el ingreso de la ayuda humanitaria a aquellos que continúan sufriendo bajo el régimen. El pueblo de Venezuela sigue resistiendo en su lucha por la democracia y la libertad, y los Estados Unidos continuará apoyándolos”, declaró Rubio.

En mensaje dirigido a los militares venezolanos, el senador estadunidense, la cara más visible de la oposición de su país al régimen chavista, pidió que tomen “la decisión correcta” y permitan el ingreso a Venezuela de la ayuda humanitaria proveniente de Estados Unidos.

“Es un crimen internacional, un crimen contra la humanidad, que esté muy claro eso y que tomen la decisión correcta”, dijo Rubio a medios, refiriéndose a la negativa del régimen de Maduro de dejar ingresar la asistencia.

Acompañados de una marea de venezolanos que lanzaban gritos de protesta contra Maduro, Rubio recorrió el puente internacional Simón Bolívar, principal paso fronterizo entre ambos países. Allí destacó la valentía del pueblo venezolano que lucha por su libertad y lo impulsó a continuar de esa manera: “No quiero que pierdan el ánimo. La libertad y la democracia requieren sacrificio”.

Desde Caracas, Guaidó mantuvo una videoconferencia con Rubio, a quien garantizó que “los venezolanos estaremos listos para hacer historia este 23 de febrero”, aunque no especificó cómo entrará la ayuda humanitaria, si se siguen oponiendo los militares venezolanos.