A los 13 años la modalidad de skateboarding que realizó su presentación en unos Juegos Olímpicos, coronó a dos patinadoras de 13 años que se convirtieron en las primeras medallistas en el Street femenil, la japonesa Momiji Nishiya y la brasileña Rayssa Leal, un ícono en su país, quienes obtuvieron las preseas de oro y plata, respectivamente en Tokio 2020.

La juventud de las competidoras de esta prueba se confirmó con la medalla de bronce, que correspondió a la nipona Funa Nakayama, que con 16 años completó el podio de ganadoras sobre la patineta callejera, un deporte urbano que se incluyó en el programa olímpico en busca de atraer nuevas generaciones de aficionados y atletas.

Momiji, cinco meses mayor a la niña brasileira, finalizó con 15.26 puntos, mientras que la sudamericana acabó con 14.64 tantos. Funa tuvo 14.49 puntos. El cuarto lugar fue para la estadunidense Alexis Sablone, quien podría ser la madre de las tres, ya que cuenta con 34 años de edad.

El medallista más joven de la historia olímpica es Dimitrios Loundras, gimnasta griego especialista en las barras paralelas, quien obtuvo la medalla de bronce con 10 años y 218 días en Los Juegos Olímpicos de Atenas 1896

Rayssa Leal, de 13 años es la brasileña más joven en subir a un podio olímpico, deporte que se llegó a prohibir en la ciudad de Sao Paulo durante los ochentas, pero que en buena parte debido a ello se transformó en una pasión a nivel nacional en el gigante sudamericano, y el triunfo de Leal se festejó en grande.

El "hada" del skate de 1.45 metros de altura y 35 kilogramos, nació y creció en Imperatriz, Maranhao, la región más pobre de Brasil, la patinadora es conocida por sus conquistas en torneos nacionales e internacionales, rompió las barreras de edad y género, ya que, escuchó en la escuela, en la familia y en los medios que era un deporte para varones o que era muy niña para practicarlo, con lo que impuso una nueva moda y afición al skate en Brasil.