La magistrada de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Mónica Soto Fregoso, dijo que uno de los compromisos y retos que tiene ese órgano es que toda impugnación presentada por una mujer, donde se denuncie violencia política de género o que no se observó su derecho a la paridad, deberá tener, por lo menos, un estudio de fondo.

Al participar en la 13 sesión del Observatorio de Participación Política de las Mujeres en México en el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Soto afirmó que México ya es un referente en América Latina en la lucha por los derechos político-electorales de las mujeres, en materia legislativa y en las cifras.

Acompañada de la titular del Inmujeres, Nadine Gasman Zylbermann; de Belén Sanz, representante de ONU Mujeres en México; de la diputada de Morena Beatriz Rojas Martínez; y del consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello, la magistrada Mónica Soto dijo que la experiencia de éxito se ha logrado con la colaboración de la sociedad civil.

Recordó un caso resuelto por el TEPJF la semana pasada, en que al sentirse discriminadas mujeres impugnaron acciones afirmativas del INE en una convocatoria para el servicio electoral, lo que obliga a la reflexión.

Tras informar de la capacitación que se ha dado a mujeres en comunidades indígenas, la magistrada Mónica Soto insistió en que es momento de reforzar la agenda con los pies puestos en la realidad, y regresar para hacer la tarea de sensibilizar, de explicar lo que es “la bondad o la necesidad de lo que son las acciones afirmativas”, e impulsar la difusión de ello.