Opinión

El uso del cubrebocas, necesario para la salud y el cuidado al medio ambiente

El uso del cubrebocas, necesario para la salud y el cuidado al medio ambiente

El uso del cubrebocas, necesario para la salud y el cuidado al medio ambiente

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Todos los procesos de transformación conllevan cambios, costumbres, hábitos, y sobre todo a nuevas necesidades. El SARS-CoV-2 (COVID-19) ha generado una pandemia y hoy en día tenemos la necesidad de adaptarnos a esta nueva realidad con una cultura de prevención y con el aprendizaje continuo que esto requiere, ya que no podremos permanecer en el encierro constante por lo que tendremos que usar las herramientas que se requieran para sobrevivir.

Los cubrebocas se volvieron un artículo de primera necesidad, mismo que data desde el siglo XVI, pero su uso era más bien a manera de amuleto para alejar influencias maléficas durante el brote de la peste bubónica en Europa; los médicos empleaban una máscara con una forma de pico de pájaro que se usaba con hierbas dentro, para evitar los olores y gases generados por los pacientes. Ya para el siglo XIX el descubrimiento del mundo microbiano permite elaborar las primeras teorías de la diseminación de enfermedades.

En el mundo moderno es el brote del virus SARS (2003) el que generaliza el uso de este dispositivo que consta de una barrera física para evitar la contaminación microbiológica emitida por la nariz y la boca; mucho se ha discutido si el virus pasa o no esta barrera debido a su pequeño tamaño, no es el virus el que por sí solo puede atravesarlo, es su medio de transporte, la saliva o la mucosa que puede transportar en un milímetro hasta 100 millones de microorganismos. Por ello hoy es indispensable el uso del cubre bocas en materia de salud, ya que hay muchos portadores asintomáticos diseminando de manera inconsciente y sin que se perciba la enfermedad.

También en materia ambiental surgen varias preguntas, como por ejemplo: ¿Qué hacemos después con esos residuos que se desechan por millones?, ¿Implican un riesgo a la salud o al ambiente? Si, por ello hay que manejarlos como residuos sanitarios, la SEDEMA y la SEDESA indican a la población la separación de residuos de este tipo en la categoría de residuos sanitarios, que incluye cubrebocas, pañuelos, guantes y chicles que se deben manejar en una bolsa por separado e identificarla con marcador permanente como Residuo Sanitario, esta bolsa puede permanecer en tu hogar hasta por una semana bien cerrada y entregarla al personal de recolección previamente rociada con una solución de 2 cucharadas de cloro por litro de agua.

Es siempre mejor que se empleen cubrebocas reutilizables que se lavan o se desinfectan con el lavado adecuado y de esta manera bajar nuestro impacto ambiental, huella ecológica y disminuir el volumen de residuos de manejo especial. El uso adecuado del cubrebocas se cumple cuando se tapa por completo la nariz y la boca, tiene que estar fabricado en materiales respirables pues el uso de elementos muy densos no permite la adecuada ventilación e incrementan la concentración de CO2 en nuestro organismo disminuyendo la capacidad de reacción.

Hoy, es nuestra responsabilidad cuidarnos y cuidar a los demás no bajando la guardia, pero también siempre siendo responsables con el medio ambiente y nuestro entorno.

*Presidenta de la Comisión de Preservación del Medio Ambiente, Cambio Climático, Protección Ecológica Animal del Congreso de la CDMX.