Nacional

“En la educación, la música y la cultura, a la mujer le toca picar piedra”: Erika Ramírez

Erika Ramírez, la primera mujer en dirigir la Orquesta Sinfónica Infantil y Juvenil del CCMC, charla con Crónica sobre los caminos para transformar la vida de niños y jóvenes

Erika Ramírez, la primera mujer en dirigir la Orquesta Sinfónica Infantil y Juvenil del CCMC, charla con Crónica sobre los caminos para transformar la vida de niños y jóvenes

“En la educación, la música y la cultura, a la mujer le toca picar piedra”: Erika Ramírez

“En la educación, la música y la cultura, a la mujer le toca picar piedra”: Erika Ramírez

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Es maestra frente a grupo, en la mejor escuela de tiempo completo de la Ciudad de México, es también la primera mujer en dirigir la Orquesta Sinfónica Infantil y Juvenil del Centro Cultural del México Contemporáneo (CCMC), y es asesora pedagógica en la Normal. Logra hacerlo todo con mucho esfuerzo, enfoque, disciplina, ejercitándose, quitándole horas al sueño y el apoyo de sus autoridades inmediatas.

Ella es Erika Ramírez Pérez, docente frente a grupo de la Escuela Secundaria Anexa a la Normal Superior de México (ESANS). Dama elegante con talento para enseñar y dirigir musicalmente, con estudios profesionales de Dirección Orquestal en el extranjero, en su mayoría pagados por ella misma para, como dice, estar bien entrenada y a la altura del reto.

–¿Quién demanda más, los alumnos o el instrumento?.

–Ambos, porque los adolescentes son muy demandantes a lo largo de 12 horas, muchas actividades artísticas y deportivas en medio. Con el instrumento, igual, hay que sentarse, estudiar, dedicarle muchas horas…

Sentada junto a un violoncello, su instrumento favorito, en el exquisito patio del CCMC, la apuesta cultural del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, comenta: “Conducir la educación y docencia de un país podría parecerse mucho a dirigir una Orquesta; no hay mejor ejemplo para aprender a dirigir cualquier cosa, de hecho”.

“Todos tenemos que estar pendientes de todos, todos tenemos que estar cuidando lo que hacemos, entrando en el momento justo, ir de la mano, y siempre al compás de un Director, del que esté enfrente, porque confías en él, y tener claro que se está por convicción y no solo por trabajo”, explica con pasión.

Muestra una consciencia elevada de la responsabilidad que implica ser la primer mujer en dirigir la Orquesta Sinfónica Infantil y Juvenil del CCMC, a la cual pudo arribar con mucho talento y también de un singular apoyo del secretario general del Sindicato, Alfonso Cepeda Salas, y del Director General del Centro Cultural, maestro Jaime León Navarrete.

Que una mujer dirija una orquesta es algo aún inusual. Cuenta que en su más reciente viaje a Palermo, Italia, de 8 directores llegados a enriquecer sus conocimientos, solamente había otra mujer, porque en la música y la cultura también a la mujer le toca picar piedra, y en su caso también ser docente.

Cultura transformadora. La maestra Erika expresa que en el futuro ideal vislumbra que se la otorgue mayor apoyo a la importante labor social y aporte cultural que lleva a cabo el CCMC.

La cultura, dice, puede cambiar a México, pero le falta apoyo. La Reforma Educativa necesita incorporar con mayor vigor al arte y la cultura, porque ambas siguen siendo un déficit... sí aumentaron una hora de clases, pero también le quitaron a los estudiantes la Historia del Arte. Comenta que ahora se habla mucho del conocimiento del entorno, de la música ambiental que rodea a los alumnos, pero eso es lo que oyen siempre y lo requerido es arte, música y cultura. Juanito, ejemplifica, llega agresivo, violento por su historia de vida,  a su Taller de Percusiones y al hacer contacto con la música, eligiendo el instrumento de su agrado, comienza a transformarse clase a clase, compás tras compás.

La Maestra dice que este perfil de chicos, agresivos e incontrolables, son los que busca el CCMC por la energía que tienen, sólo hay que engancharla al arte. No se vuelven más dóciles, dice, se vuelven más disciplinados y eso los cambia para bien.

Canalizar la energía de los más activos, y que los muy tímidos e introspectivos también encaucen su necesidad de expresión al arte; les aporta a ambos perfiles mucha seguridad, comenta con gozo.

Actualmente, la Orquesta Infantil y Juvenil que dirige está integrada por 38 a 40 alumnos tocando, con edades que oscilan entre los 3 y 18 años, que es límite de edad. Uno de esos chicos acaba de entrar al conservatorio, y tienen solicitudes en otras sedes para que lleven su “Ensamble de Alientos” y su “Cuarteto de Chelos”, como frutos del CCMC.

Cultura, salud y empatía. Al buen músico se le pide hacer ejercicio, para poder tocar el chelo se necesita tener fuerza en los brazos; ayuda nadar, por ejemplo. Ejercitándose, el músico puede aguantar las posiciones que demandan los instrumentos, porque una mala postura afecta la calidad de la interpretación.

Erika Ramírez explica que un concierto de 50-60 minutos, sin intermedio, o una ópera de 2 horas, requieren concentración absoluta y una condición física muy buena.

La maestra Erika Ramírez dice que la cultura y el arte sensibilizan y empatizan, virtudes que se están desmoronando en la sociedad, ya casi no imaginamos qué está pensando y sintiendo el otro. Lo mismo sucede en una clase frente a grupo porque una de las tareas fundamentales del maestro es sensibilizar a los grupos, explica.

Antes de terminar la conversación, habla del futuro, de conciertos, del proyecto de dar clases en penales del país, de colaborar en los talleres para profesionalizar a los maestros en México... muchos proyectos en los que el Centro Cultural del México Contemporáneo del SNTE está presente.