Autoridades de la Central de Abasto anunciaron obras de reencarpetado y sustitución de drenaje en las instalaciones; sin embargo, lo que tiene muy molestos a comerciantes, empleados, compradores, diableros y trabajadores de estacionamiento es que en una semana de cierre de vialidades, no han hecho nada: Sólo afectar el tránsito y el comercio en el sitio más grande de venta de América Latina. “Cerraron desde el lunes (10 de junio) esta zona (la noreste, que colinda con la avenida Río Churubusco), y sólo ayer hicieron un hoyito. No dejan pasar, provocan un caos vial que nos genera pérdidas, puesto que no llegan los clientes”, dijo molesto Facundo, comerciantes de productos avícolas.