El feminicidio infantil creció en 2019 un 13.5% respecto al 2018. Durante 2018, ocurrieron en promedio 7 asesinatos al mes contra niñas y adolescentes, y en 2019, esta cifra se incrementó a ocho feminicidios infantiles cada mes.

En total, durante el año pasado se registraron 98 feminicidios en contra de menores de edad, es decir de 0 a 17 años.

Sin embargo los primeros 7 meses del 2019, representaron el periodo más violento por el delito de feminicidio en contra de niñas y adolescentes al registrarse 59 delitos de este tipo, lo que significó un crecimiento de 13.5% respecto al mismo periodo de 2018.

Es decir, el feminicidio infantil va al alza sin que haya una estrategia o políticas públicas en el gobierno federal para frenar la violencia machista y superar los obstáculos en el acceso a la justicia para las niñas y mujeres, advierte el Balance Infancia y Adolescencia en México, que elaboró la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) con base en cifras oficiales.

“Niñas, niños y adolescentes se volvieron invisibles para esta nueva administración al no formar parte de ninguno de los 25 proyectos estratégicos que presentó el presidente Andrés Manuel López Obrador”, acusa.

Dejar fuera a la niñez de los programas prioritarios —agrega— responde una mirada adultocéntrica que considera a niñas, niños y adolescentes como ‘objetos de protección’ de su grupo familiar. Es decir, no se logra reconocer su “equivalencia humana” frente a las personas adultas, por lo que continúan recibiendo un trato desigual en todas las acciones del Estado y al interior de sus núcleos familiares.

El estudio establece que entre enero 2015 y julio de 2019, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, (SESNSP), registró tres mil 297 feminicidios en todo el país, 317 ocurrieron entre la población de 0 a 17 años, es decir, uno de cada diez feminicidios en el país afecta a niñas y adolescentes.

De enero de 2015 a julio de 2019, el Estado de México, Veracruz, Jalisco y Chiapas (en ese orden) serían las entidades más letales por razones de género en contra de niñas y adolescentes, con 55, 33, 23, y 21 víctimas de este delito, de manera respectiva.

Como lo hace desde hace 10 años, el Balance 2019 de la Redim busca identificar los avances y retrocesos en el cumplimiento de las leyes mexicanas y el cumplimiento de los compromisos internacionales en derechos humanos e igualdad de género y advierte que es necesario que las políticas para frenar la violencia contra las mujeres incluyan explícitamente a las niñas y se acompañen de amplias acciones de prevención, al involucrar a niños y hombres adolescentes en la construcción de otras formas de relación no sexistas, ni basadas en la dominación.

Los feminicidios infantiles se han incrementado de manera dramática en los últimos años, pues en el 2015, se registraron 50 feminicidios contra niñas, e 2016 se perpetraron 54 mientras que en el 2017 y 2018 las cifras casi se duplicaron.

En el 2017 se registraron 66 feminicidios contra niñas y en el 2018, fueron 88 mientras que en el 2019, se presentaron 98 delitos de este tipo, según datos del SESNSP.

INDIFERENCIA GUBERNAMENTAL. Según el documento de la Redim que encabeza, Juan Martín Pérez García, el 2019 fue el año más letal para niñas, niños y adolescentes: más de 21 integrantes de este sector de la población, perdieron la vida, víctimas de homicidio doloso. Eso sin contar más de 7 mil casos de niños desaparecidos.

La organización civil acusa que diariamente desaparecen cuatro niñas y niños menores de 17 años a la par que 3.6 niños y adolescentes son asesinados sin que la nueva administración que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador atienda los urgentes llamados a desarrollar una “Estrategia Nacional de prevención y atención a la violencia armada contra niños, niñas y adolescentes” con apoyo de expertos internacionales y sociedad civil.

Una estrategia —agrega— que permita establecer con claridad los tramos de responsabilidad institucionales a nivel federal, estatal y municipal.

Detalla que por entidad federativa se observa una reconfiguración de la violencia, pues en 2012 Guerrero y los estados fronterizos al norte del país tenían los mayores índices de violencia; para 2018, Chihuahua alcanza la mayor tasa de homicidios, pero la violencia se desplaza hacia el centro y occidente mexicano, convirtiendo a Guanajuato en la entidad con mayor número de homicidios para la población de 0 a 17 años, pero la cuarta en cuanto a tasa.

De 2013 a 2018 el Estado de México es la entidad con el mayor número de homicidios contra niñas y adolescentes mujeres, aunque existen diferencias por el cálculo de tasa.

La Confederación Patronal Mexicana (Coparmex) por su parte advierte con datos del INEGI, sobre la violencia de género que se vive en México donde 10 feminicidios ocurren en promedio todos los días.

“Esto es un incremento de más del 100% en los últimos 4 años. Un dato dramático es que 50% de ellas fueron asesinadas por su esposo o concubino, y en 30% de los casos el crimen ocurrió dentro de su propia casa”, establece el organismo patronal.

Ante este indignante panorama, no se observa un respuesta enérgica ni una estrategia clara de la autoridad para erradicar el problema, remata.

FEMINICIDIOS INFANTILES

2015: 50

2016: 54

2017: 66

2018: 88

2019: 98