El Gobierno de la Ciudad de México no otorgó el permiso de impacto urbano para la construcción de una segunda torre del proyecto Mítikah, en Churubusco y Universidad, alcaldía de Benito Juárez, ya que se decretó que el predio no aguanta por las condiciones de la zona.

La torre contemplaba distintos pisos de departamentos, de los cuales ya estaba construida una parte, sin autorización.

Se demolerá.

“Es una zona muy impactada con diversos desarrollos, sobre todo del pueblo originario de Xoco, y la Seduvi en su análisis determinó que en términos de agua, de movilidad, era suficiente lo que ya se estaba planteando para que todavía muchas más personas vivieran en este sitio”, dijo Claudia Sheinbaum.

Y agregó: “Parte del proyecto está sujeto a evaluación de impacto urbano para obra nueva, de tal suerte que esa parte no se va a autorizar. Vamos a seguir trabajando desde luego, en todo lo relativo a la mitigación respecto a las obras que ya se realizaron”,  explicó la secretaria de Desarrollo y Vivienda, Ileana Villalobos.

Mientras que la Jefa de Gobierno comentó que se mantiene la construcción de los otros proyectos de la misma empresa, como lo es un centro comercial.

Sheinbaum aseguró que sólo serán demolidos los pisos de la segunda torre que ya había iniciado su construcción.

Añadió que la firma constructora —Mítikah— también debe cumplir con la mitigación respecto a obras de drenaje y la construcción de una avenida.

Dicha empresa se define a sí misma en su página de internet como un sitio de zona residencial, en la que sus torres contarían con un centro comercial, zona de juegos infantiles, una playa artificial, bares, restaurantes, oficinas, salas de conferencias, alberca, gimnasio y una conexión directa con un supermercado.

Los precios de los apartamentos que van desde los 80 m2 a los 200 m2 superan los 6 millones de pesos, según sitios de inmuebles.

Por otra parte, la titular de la Seduvi comentó que 174 expedientes revisados en polígonos de actuación, correspondientes a los años de 2017 al 2018 y 48 resultaron tener irregularidades.

En 24 de ellos se iniciaron juicios de lesividad; y 20 fueron revocados porque según el Gobierno de la Ciudad de México se les otorgaron los permisos durante la administración pasada y no fueron revisados; otros 17 proyectos se han suspendido y en cuatro casos, donde los edificios ya están habitados, se comenzarán a dar las sanciones correspondientes a los desarrolladores.

Además, en el caso específico de desarrollos inmobiliarios que se encuentran sobre la carretera México-Toluca, están en proceso de revisión 44, de los cuales siete han sido suspendidos por el Instituto de Verificación Administrativa (Invea) y dos más por la alcaldía de Cuajimalpa.

“El Gobierno comenzó a revisar los 174 dictámenes entregados durante 2017 y 2018 desde el pasado 5 de diciembre. En 48 de los cuales se encontraron diversas irregularidades: asignación de un mayor potencial de construcción; determinación de límites de zonificación que originan mayor área habitacional; autorización de mayor cantidad de niveles de construcción; ampliación de la superficie de desplante; relocalización de usos entre alcaldías”, entre otros, comentó Villalobos.