La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, aclaró que lo ocurrido este jueves en el Reclusorio Oriente fue una riña, no un motín, y confirmó que la situación está controlada.

Entrevistada durante una entrega de vivienda, explicó que de manera preventiva se desalojó a las familias que estaban de visita y entró un grupo especial de la policía.

Hubo una riña, por lo que se desalojó una parte de las familias que estaban de visita, aunque más bien se les invitó a salir de manera preventiva; el subsecretario del Sistema Penitenciario solicitó que entrara la policía, por lo que ingresó un grupo especial, detalló la mandataria capitalina.

"La información que tengo es que ya se contuvo la situación y pueden entrar nuevamente las familias”, añadió.

Sheinbaum Pardo explicó que el incendio registrado el pasado 15 de agosto, en el que murieron tres reos, tuvo otras características, “pero en efecto, es muy importante el tema de los reclusorios, del sistema penitenciario".

Recordó que varios convictos de ese centro de reclusión fueron trasladados a penales de alta seguridad, pues eran solicitados por el gobierno federal; “entonces, estamos ahí en trabajo y en este momento está contenida la situación”.

Sobre la cabeza humana que apareció esta mañana cerca del reclusorio, en la colonia Jacarandas, dijo que hay una línea de investigación muy clara que sigue la procuraduría capitalina.