Hubo grito, aunque sin masas en el Zócalo, con arengas nuevas, incluyendo la palabra esperanza, aquella que Morena se agenció para autodefinirse como la esperanza de México durante la etapa electoral.

En punto de las 23:00 horas y ante un Zócalo capitalino completamente vacío, acompañado de su esposa Beatriz Gutiérrez Müller, el presidente Andrés Manuel López Obrador dio inicio al Grito de Independencia.

Entre sus arengas nombró a los habituales Hidalgo, Morelos, Josefa Ortiz de Domínguez y Leona Vicario, aunque también hizo referencia al heroico pueblo de México, a las comunidades indígenas, a la grandeza cultural de México, a la libertad, la justicia, la democracia, la igualdad, a nuestra soberanía, la fraternidad universal, el amor al prójimo y la esperanza en el porvenir…

Para terminar con los característicos gritos de ¡Viva México! ¡Viva México! ¡Viva México!

Con el Himno Nacional de fondo musical, fue encendida la antorcha de la esperanza en el corazón de la Ciudad de México. El repique de campanas dio inicio a los juegos pirotécnicos, cuyo acompañamiento fue la música regional mexicana.