Los países que conforman el Grupo de Lima, a excepción de México, se sumarán a la iniciativa de Perú de no permitir el ingreso a sus territorios a personas vinculadas al gobierno venezolano, empezando por el propio presidente del país, Nicolás Maduro, que mañana jueves jura su segundo mandato, no reconocido por la mayoría de las naciones del hemisferio.

Según detalló el canciller peruano, Néstor Popolizio, Maduro encabeza la lista de 93 integrantes de la cúpula del régimen venezolano, desde secretarios de gobierno, jueces y empresarios afines, que desde ayer no podrán ingresar en Perú, así como tampoco podrán hacerlo sus familiares más cercanos.

El canciller colombiano, Carlos Holmes Trujillo, confirmó, poco después, que los gobiernos del Grupo de Lima acordaron impedir a altos funcionarios del régimen venezolano la entrada al territorio” de sus respectivos países.

El Grupo de Lima está conformado por Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Guyana, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía.

México, el verso suelto. Sobre la decisión de México de no firmar la declaración del Grupo, el canciller colombiano dijo que el Grupo “recibió con consideración y con respeto la posición del gobierno” de Andrés Manuel López Obrador, de no sumar su firma al aislamiento regional del régimen venezolano y a no reconocer la ilegitimidad del segundo mandato de Maduro.

Asimismo, el canciller colombiano resaltó que México expresó su intención de continuar formando parte del Grupo de Lima.

Apoyo militar. La creciente marginación internacional de Maduro contrasta con la posición de la cúpula venezolana, que al igual que en Cuba se ha convertido en la mejor garantía de la supervivencia de su régimen.

Ayer, el ministro venezolano de Defensa, Vladimir Padrino, leyó un comunicado junto a una parte del Alto Mando militar en el que ratifican su apoyo a Maduro.

La cúpula militar expresa “su irrestricto apoyo y lealtad absoluta a nuestro comandante en jefe, para el periodo 2019 - 2025”, dijo Padrino en la declaración que fue transmitida por el canal estatal VTV.

Asimismo, el ministro de Defensa llamó “traidores” a los dirigentes de la oposición antichavista, por considerar que, con su apoyo al Grupo de Lima, estaban aprobando la resolución que condena a Venezuela por no respetar la integridad territorial de Guyana, país al que Caracas reclama la región petrolera fronteriza de Esequibo.

La condena hace referencia al incidente ocurrido a finales de 2018, cuando la Marina venezolana interceptó a dos buques de la petrolera estadunidense Exxon, que realizaba exploraciones para el gobierno de Guyana en las aguas en disputa.