Al menos diez personas murieron en el incendio registrado la tarde del jueves en un hospital privado de Río de Janeiro, que obligó a evacuar a los mas de cien pacientes ingresados, confirmaron este viernes los bomberos.

El fuego se inició tras un cortocircuito en el generador de energía de uno de los edificios del hospital Badim, situado en el barrio de Maracaná, en la zona norte de la ciudad, según las primeras informaciones del centro médico.

Al menos 90 de los 103 pacientes ingresados fueron trasladados a ocho centros médicos de Río de Janeiro.

El alcalde de la ciudad, Marcelo Crivella, que acudió este viernes al hospital, declaró a los medios de comunicación que el edificio "contaba con todos los equipos previstos por ley".

Los bomberos y la policía civil llevarán a cabo en las próximas horas una investigación en el edificio para determinar si el incendio se produjo por un cortocircuito en el generador de energía, como informó el hospital.

Las llamas provocaron una gran columna de humo que se extendió rápidamente por el inmueble, lo que obligó su evacuación.

En las puertas de la clínica se registraron escenas de nerviosismo y los médicos y enfermeros improvisaron un hospital de campaña.

Los bomberos tardaron unas dos horas en controlar el incendio y, según informó el hospital en un comunicado, se movilizaron más de cien médicos.