El gobierno indio desató este lunes una tormenta política al retirar a la Cachemira india su estatus de autonomía especial con el impulso de una ley que divide la región en “dos territorios de la unión”, lo que conlleva el fin de sus principales competencias y otorga mayor control a Nueva Delhi.

De esta manera, el artículo 360 de la Constitución india, que otorgaba desde 1947 un estatus especial a Jammu y Cachemira, pierde todo efecto, así como su propia Carta Magna, que brinda derechos especiales a sus ciudadanos, los únicos que podían, por ejemplo, adquirir propiedades en la región.

El partido nacionalista hindú BJP, del primer ministro Narendra Modi, prometió antes de las elecciones de mayo, que ganó ampliamente, derogar el artículo 370, como parte de su política que busca una “India para los hindúes”, con las minorías, como la musulmana en Cachemira, supeditadas a ellos.

BLOQUEO ABSOLUTO. La tensión empezó a crecer cuando esta semana pasda el gobierno de Modi desplegó 25 mil militares en la región, que está en disputa con Pakistán.

Luego, este domingo India ordenó sin previo aviso evacuar inmediatamente a los 29 mil turistas que había en la región, cortó todas las comunicaciones de Cachemira, incluyendo internet y la telefonía, y prohibió cualquier reunión de más de cuatro personas.

También ordenó el arresto domiciliario de algunos de los principales líderes opositores de la región.

TENSIÓN DIPLOMÁTICA. Imágenes vía satélite difundidas por algunos canales locales mostraban este lunes calles desiertas en toda la región, excepto por la presencia de soldados desplegados cada pocos metros entre barricadas y vallas.

El gobierno paquistaní calificó ayer la decisión como una medida contraria a las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU respecto al estatus de Cachemira como región en disputa y aseguró que ejercerá todas las opciones posibles para revertirla.