DR. LORENZO CÓRDOVA VIANELLO, PRESIDENTE DEL INE:

+Un burro puede fingirse caballo,

pero tarde o temprano rebuzna

¿..?

Si no conocía usted el refrán que dice: A toda capillita le llega su fiestecita..,… pues váyase acostumbrando a que se lo repitan porque su propósito de mantenerse al frente del INE contra viento y marea puede ser que no le cueste ni una gota de sangre, pero sí muchas, muchísimas de sudor e incluso una que otra lágrima.

Pero como ayer le pedí aquí al fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, hoy le sugiero a usted:

Aguante, doctor…

Usted dijo anteayer:

“… en los últimos años el organismo (INE) nunca había enfrentado un clima tan adverso y hostil como ahora.”

Yo diría que nunca, doctor, y esto es apenas el principio, porque en el origen de esta inédita situación se encuentra, desde décadas hasta la fecha, una gran paciencia y una voluntad de hierro para alcanzar las metas que se establece, así como también para vencer los escollos que encuentra al paso.

Efectivamente, el Instituto Nacional (Federal en su origen) Electoral fue uno de los organismos de gobierno que mejor recepción y mayor aceptación, desde la segunda parte del siglo XX y sus administraciones, una tras otra, se esmeraron en mantenerle esa calidad que debe envidiar —ahí sí, con sangre…— todo el demás aparato de gobierno.

Pero algunas voluntades no soportan la existencia de la menor sombra que les robe la luz del sol y se esfuerzan, con verdadera obsesión, a eliminarlas. El orgullo, doctor Cordova, que mantiene el INE, es lo más parecido a un dolor clavado en el pecho sin que lo provoque enfermedad físiológica alguna; que se va, que regresa; que crece y disminuye pero que no se va; ni siquiera se esconde… Bueno, pues hay que actuar, ¿no?

Y como usted ha dado la voz de alarma… La acción ya comenzó.

Otras de sus palabras expresadas públicamente apenas anteayer, fueron:

“El INE no es de nosotros —de una persona—. Es de la sociedad, pero tampoco el INE es de un partido o de una fuerza política. Por eso tenemos que cuidarlo… Son momentos muy complicados para la institución; probablemente nunca ha habido un clima tan adverso, tan hostil como ahora…” Pero su respuesta y, por lo que dejó entrever, la de prácticamente todo el conjunto administrativo que lo integra, ha cerrado filas y se dispone a trabajar con el ahínco de siempre en la organización de los procesos electorales del año 2021. “Que la gente vote como quiera votar, pero de manera libre. La segunda responsabilidad es cuidar al Instituto.”

Los rayos y las centellas van a caer con previsible constancia, doctor, a partir de que usted violó la orden transferida del Poder Ejecutivo al Judicial para establecer que ni un servidor público, sea cual sea su especialidad ni los riesgos de su función, reciba un salario superior al del Presidente de la República. El Presidente de la República decidió ganar el sueldo que él mismo se autorizó, sin que haya de por medio un estudio que lo justifique. Eso sí duele, doctor. La desobediencia.., aunque usted lo vea como enseguida transcribo:

“Es la manera de ir definiendo la alienación institucional con la que vamos a hacer frente a los desafíos de la elección de 2021, pero es también la defensa de la institución, que no es de nosotros, no es patrimonio propio como algunos intelectuales orgánicos andan queriendo vender a partir de las decisiones que estamos tomando.”

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