Metrópoli

Jefas de familia hacen hasta lo imposible por lograr un hijo universitario

Jefas de familia hacen hasta lo imposible por lograr un hijo universitario

Jefas de familia hacen hasta lo imposible por lograr un hijo universitario

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Emelia Ruiz, es madre soltera de 3 hijas, su esposo las abandonó hace algunos años.

Emelia no tuvo la oportunidad de hacer una carrera universitaria, en su caso porque desde pequeña quedó huérfana.

A lo largo de su vida ha tratado de proporcionar a sus hijas lo mejor y ha luchado por enseñarles el valor del estudio.

Todas sus hijas van a escuelas públias.

Ella piensa que las privadas son un negocio, que no está a su alcance y que conforme los alumnos avanzan los costos se hacen más excesivos.

"Si tus papás no tienen economía, no tienes oportunidad de entrar.

Mi mamá no sabía leer; cuando crecí trate de estudiar, aunque sea un poco y de trabajar mucho; y aunque tampoco tengo la mejor economía, motivo a mi hija a que le eche jpnas a la escuela y que acabe su carrera", comenta Emelia.

Ha estado desde las 7 de la mañana en la banqueta a un costado de la entra principal de la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura Unidad Ticoman del IPN, a la expectativa de ver salir a EVelyn.

Si su hija es seleccionada, se convertirá en la primera de la familia en alcanzar el nivel de estudios superiores.

Emelia ha tenido que trabajar inclusive de noche para proveer a sus hijas el dinero que necesitan para transportarse a la escuela, comer y adquirir los materiales que lleguen a requerirles en el colegio.

"Evelyn va en la Voca 5 y quiere estudiar Turismo y la verdad es que espero que sí haya estudiado mucho para el examen, porque no tuve la oportunidad de pagarle un curso para prepararse mejor, solo le compre la guía de estudio que sacó el Poli, pero estoy totalmente conf ada en que mi niña va a poder aprobar este examen y que sólo será un paso más en su vida profesional llena de éxitos".

Muy cerca de Emelia se encuentra Leticia Martínez, quien es madre y la única jefa de familia.

Está recargada en un árbol en pos de la poca sombra que puede proporcionarle.

Lleva sus objetos personales pegadas al pecho en lo que parece ser una mochila escolar; espera a Jonathan, su hijo mayor quien aplica por segunda vez la prueba para el ingresar al IPN; la primera, falló.

"No podría solventar una escuela de paga, en caso de que Jonathan no se quede...

pues yo le dije que hiciera todo lo posible y si no, pues va a tener que entrar a trabajar para hacer el próximo año el examen y así intentarlo hasta que se quede.

Es la única opción que tenemos", añade con semblante de preocupación.

Al final sonríe, parece que la conf anza en su su hijo está de vuelta.

Jonathan es egresado de un de los Centros de EstudiosTecnológicos e Industrial y de Servicios, o, como son mejor conocidos, un CETIS.

El año pasado realizó su examen para ingresar a la Escuela Superior de Turismo en donde busca convertirse en uno de los más exitosos turismólogos, pero a pesar de sus deseos y aspiraciones continua sin poder entrar a estudiar en las instalaciones del Politécnico Nacional.

En ocasiones, cabizbajo, le ha contado a su mamá que llega a desechar la idea de lograr convertirse en licenciado.

Actualmente se encuentra trabajando, pero la oferta laboral para las personas que solo tienen la preparatoria Concluida no es muy favorable, los salarios son tan bajos que no le permiten costear una licenciatura en alguna institución particular.

Ese es el motivo por el que Jonathan continua intentándolo en el IPN.

"Llegamos con muchos nervios, porque es la segunda vez que mi hijo aplica su examen, el año pasado egreso de un CETIS, pero no pudo obtener ningún lugar; por eso motivo a mi hijo a que estudie y no se quede estancado, porque ya ahorita en todos lados les piden pues estudios de más preparación, como la universidad.

También hay trabajo ahorita que sale de la preparatoria, pero es muy poquito lo que ganan", dice, " hago todo lo posible de apoyarlo en los gastos y en lo que puedo, porque ahora sí que todo está pesado.

Ni yo ni Jonathan nos vamos a dar por vencidos...

espero en Dios que se quede y si no es así, no importa: continuaré apoyándolo y ambos seguiremos trabajando para que el próximo año vuelva mucho mejor preparado y logremos juntos este objetivo tan grande", concluye la madre de uno de los muchachos que se jugó su futuro ayer.

(In)Movilidad social
Según datos obtenidos por la Encuesta de Movilidad Social en México 2019 realizado por el Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), solo 2 de cada 10 mexicanos logran ascender en la escala social para salir de condiciones de pobreza y este dato empeora si se es mujer y con hijos, pues lograrlo cuesta el doble de esfuerzo que a
un hombre.
“En México, la movilidad social aún es baja: 74 de cada 100 personas que nacen en la parte más baja de la escalera social, no logran superar la condición de pobreza", resume la encuesta de Movilidad Social en México 2019.
En el estudio también se establece la posibilidad de ascender en la escala social, en el país eso depende mucho del lugar donde se nace, pues los connacionales que viven en el sureste del territorio mexicano tienen menos posibilidades de salir de la pobreza si se les compara con los del norte.