Opinión

La 4T embiste a Javier Sicilia

La 4T embiste a Javier Sicilia

La 4T embiste a Javier Sicilia

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

El poeta Javier Sicilia es el nuevo villano del culebrón de la 4T.

El régimen tiene un apetito insaciable de adversarios. Para adjudicarse grandes hazañas tiene que enfrentar a grandes enemigos y derrotarlos en las epopeyas de las conferencias mañaneras y en ese campo de batalla que son las redes sociales en las que los golpeadores de Morena juegan de local. Son expertos y despiadados, como furibundos apaches cortando cueros cabelludos.

Sólo necesitan una señal de alguno de los capitanes de Morena, Batres, Villamil, Ramírez o John, quien esté a cargo, para abrir fuego a discreción. Ahora tienen en la mira a Sicilia. Cometió el gran pecado, imperdonable, de criticar al jefe de máximo, en particular su singular estrategia de seguridad. No sólo eso, anunció una marcha de protesta.

Eso dolió en Palacio y ya se puso en marcha la maquinaria para triturar a Sicilia que durante algún tiempo fue afín a AMLO, a sus luchas, pero ya no. No se conoce bien a bien la razón del rompimiento pero hay quien dice que AMLO sintió que en su campaña 2012 contra Peña Nieto, Sicilia se mantuvo alejado y acaso por eso cuando el poeta trató de darle un beso en la mejilla al político, el tabasqueño lo rechazó de manera destemplada.

Tal vez sólo sea un pleito de dos egos descomunales, el hecho es que la relación se rompió y ahora ya López Obrador ubicó a Sicilia en la oposición, sobre todo después del anuncio de que Sicilia y LeBarón encabezarán la marcha de protesta contra la estrategia del gobierno de AMLO para abatir la inseguridad. El equipo de Presidencia sabe que son tipos de cuidado y que pueden meter mucho ruido incluso entre su propia clientela filomorenista. De ahí la ofensiva que comenzó a desplegarse en las redes sociales. Antes el poeta había dado a la prensa copia de una carta al presidente que no tiene desperdicio, dice:

“Antes de que las mañaneras, la velocidad de la realidad y la inmediatez de los medios oculten lo que el atroz crimen de la familia LeBarón puso de nuevo ante la conciencia nacional: nuestra casa ensangrentada; antes de que tengamos otra tragedia que vuelva a sacudirnos, te escribo.

“Durante tu campaña, Presidente, prometiste hacer de la verdad, la justicia y la paz la agenda de la nación. Por desgracia dejaste a un lado esas promesas para poner en su lugar otras que carecen de sentido cuando el país está en llamas. A fuerza de reducir la erradicación de la violencia a abrazos y no balazos, y a un puñado de programas sociales destejidos de una verdadera y profunda política de Estado en materia de justicia transicional, la consecuencia de los abrazos es la misma que la de las balas: sufrimiento, indefensión y muerte. Se trata de saber cuánto Estado se necesita para construir la justicia y la paz, y eso implica políticas de Estado profundas que tú, Presidente, prometiste hacer y no has hecho.

“Contra ello, te aferras a tu estrategia y pides paciencia. Pero los ciudadanos que padecemos todos los días, desde hace años, las consecuencias de la violencia, que vemos cómo sus llamas consumen nuestra casa y destrozan a nuestras familias, te decimos que ya no hay tiempo.

“Voy a caminar para recordarnos y recordarte, Presidente, la imperiosa urgencia del ahora. Este no es momento para tomar el tranquilizante del gradualismo que nos pides. Nos están matando, desapareciendo, violentando de maneras cada vez peores. Es momento de cambiar la estrategia por una a la altura de la emergencia nacional y la tragedia humanitaria que padecemos”.

jasaicamacho@yahoo.comTwitter: @soycamachojuan