Hace algunos años reporté que la Secretaría de la Función Pública tenía que revisar los contratos que en el gobierno de Enrique Peña Nieto y Felipe Calderón se entregaban en el sector salud, específicamente aquellos que se decidieron durante la gestión de Miguel Ángel Yunes y Jesús Villalobos López al frente del ISSSTE. La OCDE a cargo de José Ángel Gurría reveló a inicios del gobierno de Peña Nieto que, en los gobiernos de Peña Nieto y Felipe Calderón, casi la mitad de las compras del ISSSTE se hicieron por adjudicación directa.

Sobre el ISSSTE, le puedo confirmar que fue a través de la Jefatura de Servicios de Adquisición de Instrumental y Equipo Médico del ISSSTE en la gestión de Yunes cuando se presentaron importantes contratos directos para la compra de insumos. Un pequeño aviso, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 26 de abril de 2011, dio cuenta, por ejemplo, del fallo de uno de esos procesos dentro del ISSSTE en el que se asignaron contratos millonarios en cumplimiento —decía el aviso—del Reglamento de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público.

A una empresa denominada Giormar (que surgió gracias a los contratos de la SEDENA y una buena racha que al parecer aún no termina) se le adjudicó, por ejemplo, un contrato por 31.9 millones de pesos; a otra, identificada como Distribuidora de Equipo Médico, se le confirmó un contrato por 16.9 millones de pesos, mientras que a Vitalmex Comercial y a Toriello Guerra, las asignaciones que les correspondieron fueron por 6.5 millones de pesos. Todo directo y sin mediar licitación.

Lo interesante es que una simple búsqueda en Compranet revela que una y otra vez, entre 2009 y 2011, empresas como Giormar obtuvieron contratos con el ISSSTE, ofreciendo —se dice en los fallos— los mejores precios. Estas compañías, a su vez, compraban los insumos a grandes corporativos. ¿Para qué la intermediación? Ahora, la nueva política del gobierno federal para la compra consolidada de medicamentos confirma que la intermediación no es necesaria. Lo preocupante, sin embargo, es que al menos en la SEDENA y en la Secretaría de Marina, cuyos presupuestos no se sujetan a las reglas de la Oficialía Mayor de Hacienda para la compra consolidada de medicamentos, equipo e insumos para el sector salud, las adjudicaciones directas son la constante en el área insumos médicos. Seguramente, la titular de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval, encontraría interesante el nivel de contratos que tiene, precisamente, el Corporativo Giormar en donde su personal presume en redes sociales la administración ininterrumpida de contratos con la SEDENA y Marina. La SFP de Sandoval podría indagar, por ejemplo, si hay alguna relación entre los responsables de asignar contratos y dichos empresarios.

Apenas en diciembre pasado, Giormar y sus accionistas, según datos de Compranet, acumuló contratos por adjudicación directa por más de 770 millones de pesos, según la base de datos de contratos que beneficiaron a compañías ligadas con funcionarios públicos de Poder.

LA NUEVA APUESTA DE BLIM TV

Blim Tv de Televisa se reposiciona. Además de ampliar su catálogo, produce historias innovadoras tanto en formato como en lenguaje audiovisual. Es el caso de su estreno de este viernes titulado “Sobreamor”, serie que consta de 7 capítulos de 15 minutos cada uno, que tiene el objetivo de atrapar a una audiencia juvenil.

Uno de los aspectos más creativos de esta nueva producción de Televisa Digital es que mezcla ficción con testimonios reales y animación. Por si esto no fuera suficiente en la historia se aborda el caso de un joven de la comunidad LGBTQ+, lo que representa una interesante apertura en contenidos.

En la actualidad, blim tv mantiene un catálogo de miles de capítulos y películas, y desde septiembre pasado innovó como la única plataforma que, aunado a contenidos VOD, también ofrece más de 30 canales en vivo con todo el contenido de Televisa Networks, y contenidos de origen internacional pero en español de Telemundo, Antena 3 y Televisión Española, por mencionar algunos.

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