En el final de la campaña electoral en España, que finaliza esta medianoche, hora local, el ascenso en los últimos sondeos de la ultraderecha de Vox está captando toda la atención.

Después de una precampaña marcada por la situación de confrontación con el independentismo catalán y la lucha entre izquierda y derecha por arañar los últimos votos, Vox aparece como el principal beneficiado de la repetición electoral, ya que podría pasar de quinta a tercera fuerza del país.

Desde el lunes está prohibido publicar en España encuestas sobre la intención de voto, pero de forma no oficial se siguen elaborando sondeos que permiten conocer la intención de voto de los españoles.

Una de esas encuestas marca una subida hasta el 15 por ciento en la intención de voto de Vox, lo que significaría, si se cumple el pronóstico, que podría alcanzar 50 escaños, más del doble de los 24 que tiene desde abril, cuando entró en el Parlamento.