Cultura

La fragilidad humana retratada por Siqueiros, Gerzso, Orozco, Cuevas…

El Museo de Arte Carrillo Gil presenta la exposición "Siempre fue hoy", con más de 60 obras de 32 artistas

La fragilidad humana retratada por Siqueiros, Gerzso, Orozco, Cuevas…

La fragilidad humana retratada por Siqueiros, Gerzso, Orozco, Cuevas…

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy
La fragilidad humana que se expresa en el envejecimiento, las enfermedades, la mortalidad y un mal lenguaje creador de tiranías, son algunos temas que aborda Siempre fue hoy, exposición del Museo de Arte Carrillo Gil (MACG) que reúne 62 obras de más de 30 artistas entre éstos David Alfaro Siqueiros, José Clemente Orozco, Gunther Gerzso, José Luis Cuevas, Luis Hampshire, Pedro Reyes y Wolfgang Paalen.

La muestra que permanecerá abierta al público, en el segundo piso del museo, hasta el 29 de agosto se enmarca en la línea curatorial Bordes, es decir, el momento en que se empieza a desdibujar lo que entendemos como arte moderno y empieza a surgir el arte contemporáneo.

“Hicimos esta exposición que no estaba en el programa inicial y la hicimos porque llegó la contingencia sanitaria que cambió los planes de todos y no pudimos inaugurar las exposiciones que teníamos planeadas. Hay que decirlo, es una exposición hecha a partir de la circunstancia, del cambio que el mundo nos impuso”, comenta en entrevista Mauricio Marcin, curador en jefe del MACG.

Las obras expuestas son parte de la Colección MACG que van de los años 50 del siglo pasado hasta 2019 y aunque no es una muestra cronológica se aprecian situaciones o preguntas que aquejaron a Siqueiros o Paalen y siguen cuestionando a artistas como Pedro Reyes o Luis Hampshire.

“No es que estemos hablando puntualmente de una pandemia o de la peste del siglo pasado, pero, por ejemplo, las obras de Ambra Polidori son fotografías de esculturas clásicas y neoclásicas donde vemos solamente la nariz de esas esculturas que están despedazadas. Podemos ver e intuir la problemática universal del paso del tiempo, de la mortalidad del hombre”, expresa el curador.

Si la pandemia nos puso frente a algo que normalmente eludimos: nuestra mortalidad y condición de seres pasajeros, hay obras como las de Polidori que nos recuerdan la finitud, añade Mauricio Marcin,

Otras problemáticas que aterriza la exposición es el envejecimiento, la eterna juventud y los problemas del lenguaje, esto es, códigos que crea el ser humano para producir poder y súbditos. “Quien tiene información y conocimiento puede producir revoluciones pero también súbditos y tiranías”, agrega el curador.

Marcin explica que la litografía Coloso, de José Luis Cuevas, muestra un rostro deforme donde se pueden interpretar múltiples padecimientos físicos del ser humano. También se exhibe el óleo Desnudo, de Gunther Gerzso, que hace alusión a un cuerpo universal porque no está personificado.“Los artistas refieren a la condición de enfermedad y de fragilidad que el ser tiene, ésa es una de las cosas que se pueden ver en la muestra. Hay una obra paradigmática que es del mexicano Ulises Carrión que comenta la epidemia terrible del VIH. Podemos ver que este tipo de enfermedades han acompañado a la historia del ser humano, son casi paralelas del devenir humano, devenimos con ella, somos eso y son las formas en que el mundo nos habla de nuestra propia fragilidad", precisa el curador.

—¿Hay obras que se exponen por primera vez?

—Todas se han expuesto en distintos momentos, salvo dos obras del artista Pedro Reyes donadas al museo a través del Programa Pago en Especie de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

“Una de ella se llama Ideogram, de 2019, es una escultura tallada en piedra volcánica muy relacionada con una investigación que hizo Reyes de una escultora que se llama Geles Cabrera. La otra obra es una escultura que se llama Seated figure, de 2018”, responde.

Otras piezas que se pueden apreciar son Palabras en fuga, de María Guadalupe Aguilar Ramírez; Tiempo de pensar, de Arnaldo Coen; Pueblo mexicano, de José Clemente Orozco; Abstracción, de David Alfaro Siqueiros; y Migración de Yucatán, de Wolfgang Paalen.TIEMPO COMPARTIDO. En el primer piso del Museo de Arte Carrillo Gil se exhibe Tiempo compartido, donde tres colectivos de artistas realizan obras in situ.

“Pensamos que bajo la contingencia sanitaria muchos de los artistas habían tenido que dejar sus estudios y lugares de trabajo; quisimos coadyuvar a la escena artística en general y en lugar de ser una exposición decidimos ser un espacio de creación”, señala Marcin.

Los colectivos RRD, Nohacernada.org y Kashé & Shirotta terminan su estancia el 8 de agosto para ceder el espacio a Entre minas, Palmera ardiendo e Invasorics.