Opinión

La Iglesia en el combate a la pederastia

La Iglesia en el combate a la pederastia

La Iglesia en el combate a la pederastia

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Uno de los problemas que más daño le ha causado a la Iglesia son los escándalos ocasionados por malos sacerdotes que han cometido el delito de pederastia, razón por la que muchos fieles se han alejado de su fe. Si bien la mayor parte de estos lamentables actos de corrupción tuvieron lugar en décadas pasadas y desde que éstos se han hecho públicos y se ha procedido en materia judicial, han disminuido considerablemente los del presente, no por ello se debe bajar la guardia y dejar de combatir este mal hasta erradicarlo.

El papa Francisco ha sido tajante en cuanto a la tolerancia cero de estos casos, y en fechas recientes presidió en el Vaticano una reunión interdisciplinaria sobre el tema, a la que asistieron los presidentes y obispos de todas las conferencias episcopales del mundo.

La Conferencia del Episcopado Mexicano y la Arquidiócesis Primada de México se han pronunciado por separado condenando estos hechos y dictando medidas preventivas y punitivas; el 20 de marzo, se presentó a los integrantes del Consejo interdisciplinario de atención de víctimas de abuso sexual, que en la Ciudad de México atenderá las denuncias y trabajará en coordinación con la justicia civil.

Este equipo está formado por el padre Andrés García Jasso, presidente del Tribunal Eclesiástico de la Arquidiócesis Primada de México; la psicóloga Zaira Rosales, directora del Departamento de Protección de Menores de la Arquidiócesis; el Lic. Joaquín Aguilar, director de SNAP México; el padre Manuel Corral Martín, secretario para las Relaciones Institucionales de la Arquidiócesis Primada de México, y la Lic. Marilú Esponda Sada, directora de Comunicación de la Arquidiócesis Primada de México.

En conferencia de prensa, este Consejo afirmó que “el cardenal Carlos Aguiar Retes reitera su compromiso de hacer todo lo necesario para erradicar desde la raíz cualquier forma de abuso en el seno de la Iglesia salvaguardando, desde luego, el derecho natural y canónico de la presunción de inocencia hasta que se pruebe la culpabilidad del acusado, pero poniendo en el centro a las víctimas. Para dar la mayor eficacia a esta iniciativa de la Arquidiócesis, abrimos canales de comunicación directos con la sociedad, y pedimos la colaboración de todas las personas de buena voluntad para reconocer con claridad los casos verdaderos, evitar rumores, combatir y enfrentar difamaciones y erradicar toda forma de encubrimiento.”

Con estas iniciativas, la Iglesia, tan golpeada por este vergonzoso tema, es hoy una institución de vanguardia en el combate a este mal que daña a la sociedad entera, y que se hace presente desde el seno familiar y en distintos sectores laborales, como el académico, el de la salud, y otros más. La experiencia que se está generando en el combate a los abusos sexuales de menores, podrá servir de modelo a otras instituciones no religiosas, en beneficio de la infancia y de la propia sociedad.