Opinión

¡La luz que no se puede alcanzar!

¡La luz que no se puede alcanzar!

¡La luz que no se puede alcanzar!

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

No es para nosotros difícil imaginar hoy en día los viajes espaciales y las travesías por el espacio profundo. Mucho menos es complicado pensar que dichos viajes se podrían hacer con la ayuda de una nave espacial.

Sabiendo por supuesto que la velocidad máxima permitida en todo el Universo es la de la luz, podríamos decir que nada escaparía a ésta. ¿Pero es eso cierto?

A primer instante parecería que todo aquello que lleva una velocidad cercana a la luz es imposible de que se le escape algo, pero existe una forma de que esto pase. Me refiero a que si tuviéramos la oportunidad de ver cómo sale un rayo disparado a gran velocidad en el espacio, supongamos que son las luces de nuestra nave, puede suceder que pongamos otro rayo de luz detrás (de la patrulla espacial cuando viajamos acelerados por ejemplo) y que éstos nunca lleguen a tocarse. ¿Cómo pasa esto? Simplemente el Universo está en expansión, y con ello se va incrementando el espacio mismo entre los rayos, logrando que este ensanchamiento entre ambos, que de por si llevan la velocidad máxima permitida por la física, nos dejen tener a la vista (por así decirlo) el fenómeno de dos rayos que nunca se tocan, como esas amigas que eran muy amigas, pero hoy no se hablan ni para preguntarse la hora.

Finalmente, podemos llegar a la conclusión de que, a pesar de que la luz tiene una velocidad increíblemente grande comparada con todos los movimientos cotidianos que tenemos a nuestro alrededor, presenta serias limitantes al momento de moverse por el Universo mismo. Pues éste está creciendo aceleradamente y la luz ya no puede pisar más a fondo el acelerador.

Por el momento es todo amigos míos, y recuerden que la física nos alcanzará aunque la luz no siempre.

Twitter: @chicoparticulas