Opinión

La paradoja información por unidad de tiempo

La paradoja información por unidad de tiempo

La paradoja información por unidad de tiempo

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

En un video de Alfons Cornella titulado “Los problemas que afrontará la próxima generación”, disponible en youtube y en la plataforma TED que dio origen a esa conferencia, el ponente realiza un planteamiento de orden tecnológico a partir del minuto ocho, pero que abarca varias esferas en las que no está implicado lo tecnológico como elemento aislado, puesto que la naturaleza del problema entra en el orden de lo multifactorial y por la misma razón su solución no entraña sólo variables de naturaleza tecnológica.

Al margen de invitarlos a ver completo el video, me voy a detener a interpretar ese problema o paradoja expuesto de manera muy ilustrativa por Cornella quien sugiere que, la cantidad de información (i) por unidad de tiempo (t)  i/t crece exponencialmente y dicho crecimiento tiende a infinito. A propósito de la saturación de información, la infoxicación o como guste llamarla, hay desde luego, mucha información disponible. Esta primera parte de la paradoja la representa así: i/t=∞.

Simultáneamente la cantidad de tiempo del que disponemos para atender o discernir el crecimiento exponencial de la información tiende a disminuir. De tal suerte que la otra parte de la paradoja esta representada a la inversa, es decir t/i=0.

Aunque el planteamiento de la paradoja es muy claro, podría haber un error de principio: considerar que un problema de orden tecnológico sólo puede ser resuelto con soluciones tecnológicas. El autor recurre a dos ejemplos que no son malos: enseñar a los niños el funcionamiento de los engranes mediante un sistema lego y recurrir a más aplicaciones del llamado social media en el uso de ciertos perfiles.

Cornella recurre a un prototipo para exponer su segundo ejemplo. Por la mañana un conferencista selecciona una foto de perfil mediante una serie de autorretratos que se toma en un espejo y después elige varias aplicaciones ligadas a lo que desea que sus oyentes sepan de él: el menú aparece en torno a su imagen como una “constelación” de símbolos que orbita en torno la imagen elegida. Durante la conferencia, mediante una aplicación de realidad aumentada una asistente entra al perfil del conferencista, quien aparece, como hábil Narciso, rodeado de la simbología elegida durante la mañana y guarda la información para futuras consultas sobre el trabajo del ponente.

Más allá de la paradoja, y por medio de un lenguaje tecnokitsch del que parece cada vez más difícil que escapemos, Cornella hace otros planteamientos interesantes, siempre desde una visión un tanto mercadotécnica: los problemas que enfrentará la próxima generación serán de naturaleza más compleja y para resolverlos se requerirá de más gente especializada trabajando en torno a ellos. Esta manera colaborativa de trabajo que ya es una realidad en varios campos, tendrá que materializarse con más rapidez porque el futuro visualizado en el video de Cornella fechado en 2009, ya nos alcanzó.

dgfuentes@gmail.com