Metrópoli

La Roma vibró con los Oscar

Festejos. La gala de los Oscar se vivió en la colonia donde se filmó la película ganadora de tres premios de la academia, decenas de personas celebraron el triunfo de Cuarón

Festejos. La gala de los Oscar se vivió en la colonia donde se filmó la película ganadora de tres premios de la academia, decenas de personas celebraron el triunfo de Cuarón

La Roma vibró con los Oscar

La Roma vibró con los Oscar

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

La emoción de ver la presentación de los premios Oscar nunca fue tanta como la que vivieron ayer los capitalinos.

Por las 10 nominaciones de la producción de Alfonso Cuarón, Roma, gente de la Ciudad de México y turistas nacionales y extranjeros llenaron las salas de la Cineteca Nacional para ver el filme.

Las salas que la proyectaron   agotaron las entradas; los empleados de estos espacios señalaron que tuvieron mucho trabajo.

“Las cosas se ven bien para Roma, salas llenas para ver la película; apenas alcancé lugar para mi esposa, quiero verla antes de ver a Cuarón levantar sus premios”, comentó Erick Gutiérrez, asistente a la Cineteca.

En tanto que la colonia Roma se convirtió en el punto de encuentro para muchos mexicanos y extranjeros que querían visitar el lugar que usó Alfonso Cuarón para realizar su película.

Muchos se dieron cita en la casa de la calle Tepeji, donde todos se tomaron fotos, y presumían en redes sociales su ubicación, pues la euforia por los premios de la Academia se volvía más fuerte conforme avanzaba el día.

“Roma debe ganar todos los premios, aquí vamos a estar, aunque llueva, viendo como Yalitza y Alfonso se llevan todos los Oscares”, manifestó una señora que desde temprano se instaló en la Plaza Río de Janeiro, ­lugar en que la Secretaría de Cultura capitalina colocó pantallas y asientos para ver la transmisión de estos premios.

Ahí la gente comenzó a llegar y se instaló con tapetes, cajas de cartón y bancos para sentarse en la calle y junto a los colonos ver la transmisión, había gente que hasta canastas con comida llevó para pasar el rato más a gusto.

Alrededor de las 17 horas del día de ayer, comenzaron a llegar los invitados especiales a la alfombra roja de la Roma; no eran actores ni productores de Hollywood, como uno esperaría, eran empleadas domésticas y habitantes nativos de dicha colonia tan emblemática, que además llegaron en vehículos de los años 70, idénticos a los usados para la producción mexicana.

Pero a quienes no lograron entrar no les importó, se quedaron afuera para observar los premios y en cada momento en que la transmisión sacaba en pantalla a un mexicano, la gente gritaba y aplaudía sin que aún comenzará la gala.

“El premio a mejor Fotografía es para: Alfonso Cuarón”, comentaron los presentadores al mencionar el premio ganador, y tan sólo con decir el nombre del productor, los asistentes saltaron de emoción; otros incluso se abrazaron; un grito se escuchó por toda la colonia Roma, ocasionando que todos los que veían dicha transmisión aumentaran las expectativas para las siguientes nominaciones.

“Se rifó, este hombre se rifó, ojalá gane Yalitza, y esta noche va a estar chingona”, dijo uno de los jóvenes que miraba los premios.

De un momento a otro comenzó a lloviznar, pero no fue pretexto para que la gente se fuera; unos con sombrilla, otros compraron café y palomitas para pasar el frío de la tarde en la colonia. Gente con playeras alusivas a la película de Cuarón, y hasta una pareja con una estatuilla adornaban el lugar.

Continuaron los premios y Alfonso Cuarón levantó su segundo premio a Mejor Película extranjera, y los gritos y aplausos se escucharon por varios minutos, incluso mientras el director de cine daba su discurso.

“Cuarón genio”, se vio en un cartel de un hombre sordo, que de esa manera mostró su apoyo a la película mexicana.

La noche seguía y los asistentes esperaban con ansias ver a Yalitza y al elenco de Roma levantar las siguientes estatuillas, y a pesar de que no fue así, la gente gritó de emoción y festejó que la película de Roma había sido nominada en estos premios.

Fue gracias a esta película que dicha colonia se inmortalizó en el cine y dejó a todos los capitalinos y visitantes un buen sabor de boca, pues nunca un domingo había sido tan importante para una zona de la Ciudad de México.