Opinión

Las SIEFORES generacionales. La mejora de las pensiones

Las SIEFORES generacionales. La mejora de las pensiones

Las SIEFORES generacionales. La mejora de las pensiones

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

El tercer apunte de la CONSAR para que haya un debate objetivo y claro del sistema de pensiones de la generación AFORE, aquella que empezó a cotizar en el IMSS después de julio de 1997, se refiere al régimen de inversiones de las cuentas individuales y las estrategias del legislador, la SHCP y la CONSAR para mejorar los rendimientos y, por lo tanto, la tasa de reemplazo.

Primero hay que explicar qué es una Sociedad de Inversión Especializada en los Fondos para el Retiro (SIEFORE). Esta figura jurídica es una sociedad de giro exclusivo, creada por la Ley de los Sistemas de Ahorro para el Retiro (LSAR), con el propósito de que fuera la vía jurídica que garantizara que los recursos de los trabajadores no formaran parte del capital de la AFORE que administra las cuentas individuales, protegerlos de una eventual quiebra, y facilitar el acceso a los mejores instrumentos de inversión.

Las sociedades de inversión surgieron en el sexenio de Miguel de la Madrid para democratizar el acceso a los bonos o títulos de crédito bursátiles con mejor rendimiento en comparación con las cuentas de ahorro bancarias, y poder ofrecerlo al público en general, que carecía de información sobre el funcionamiento de la bolsa de valores tasas de interés justas.

El esquema de sociedades especializada adoptado en 1997 protege el dinero de los trabajadores porque sus recursos se convierten en sus acciones que aumentan o disminuyen de valor dependiendo el tipo de inversión. En el largo plazo, cualquier efecto negativo en las inversiones en un periodo, que se puede reflejar en una minusvalía, puede ser compensado por ganancias en otro, lo que minimiza el riesgo de pérdida.

Segundo, hay que llamar la atención que las SIEFORES sólo participan en el aspecto financiero de la seguridad social, es decir, en la administración de las reservas previsionales en cuentas individuales y cuando alguien retira recursos de ésta por pensión, desempleo o apoyo a nupcias, la AFORE vende las acciones de la SIEFORE y pone el dinero a disposición del IMSS, el gobierno federal, el derechohabiente o sus beneficiarios.

El IMSS, en todo momento, es la autoridad de seguridad social que decide si procede o no un retiro de la cuenta individual. La AFORE sólo sigue instrucciones. Además el IMSS, es la autoridad fiscal que determina y cobra las cuotas obrero patronales.

Los apuntes de la CONSAR muestran la evolución de estas SIEFORES y el mejoramiento paulatino del régimen de inversión, es decir, más rendimientos a menor riesgo. Originalmente, sólo había una SIEFORE por AFORE. Luego se adoptó el esquema de las SIEFORES generacionales, que consiste en asignar un nivel de riesgo a cada grupo poblacional por edad, entre más edad más conservadora es la mezcla de títulos de créditos bursátiles para proteger al trabajador.

En 2019, se aprobó la reforma a la LSAR que complementa a las SIEFORES con los fondos de inversión especializados, FIEFORES, que permite un régimen de inversión más versátil, pero manteniendo el cuidado de respetar la edad del trabajador como elemento esencial en la determinación del esquema de inversión. Además, el cobro de la comisión de la AFORE queda atado parcialmente al rendimiento y, por lo tanto, se genera un incentivo positivo, de tal forma que si el trabajador sufre una minusvalía en el valor de los recursos de su cuenta individual la AFORE cobra menos.

Las nuevas SIEFORES (técnicamente FIEFORES) generacionales suavizan la transición de una persona que pasa de un grupo de edad a otro y minimiza el efecto negativo en los rendimientos por el cambio de la mezcla de riesgo en la inversión. Hay un aumento en el número de SIEFORES que pasan de 5 a 10.

Las conclusiones del tercer apunte de la CONSAR son precisas, cito textual:

“Las SIEFORES generacionales:

1. Disminuyen los riesgos operativos del esquema anterior al suprimir la migración por cumpleaños del trabajador.

2. Consideran una Trayectoria de Inversión con perspectiva de largo plazo fundamentada en un riguroso análisis de las perspectivas de los mercados financieros.

3. Permiten capitalizar para el trabajador inversiones que generan sus rendimientos en períodos de larga maduración.

4. El riesgo financiero se resume en una sola variable, la edad, y en cada SIEFORE se tendrá un ajuste gradual de activos de mayor riesgo.

5. Finalmente, aunado a la flexibilización del régimen de inversión, permite mejorar la tasa de reemplazo para los trabajadores al pensionarse.”

El sistema de pensiones de la generación AFORE permite discutir públicamente estos temas complejos. Las reservas colectivas son opacas y no son flexibles, ni toman en cuenta la edad del trabajador por grupos segmentados. Los estrategias financieras no consideran la tasa de reemplazo, ni los beneficios futuros al derechohabiente, ni las cargas fiscales.

Este apunte de la CONSAR demuestra que el sistema de cuentas individuales debe prevalecer, aunque no hay que olvidar que es indispensable aumentar los apoyos solidarios y los esquemas de pensiones no contributivas con financiamiento viable.

cmatutegonzalez@gmail.com
Facebook.com/cmatutegonzalez
Twitter: @cmatutegonzalez
www.carlosmatute.mx