Mundo

Manifestación histórica en Hong Kong contra zarpazo de China

Un millón de manifestantes protestan contra la ofensiva de la lideresa de la excolonia para aprobar una ley que permitiría al régimen comunista atrapar y juzgar a “fugitivos” en su territorio

Un millón de manifestantes protestan contra la ofensiva de la lideresa de la excolonia para aprobar una ley que permitiría al régimen comunista atrapar y juzgar a “fugitivos” en su territorio

Manifestación histórica en Hong Kong contra zarpazo de China

Manifestación histórica en Hong Kong contra zarpazo de China

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Un millón de personas inundó ayer las calles del centro de Hong Kong para protestar contra el último zarpazo de la dictadura china contra las libertades de los residentes de la excolonia británica: una ley de extradición que obligaría a las autoridades hongkonesas a juzgar bajo las leyes chinas a quien Pekín lo considere.

La mayor manifestación de la historia de Hong Kong presiona a las autoridades locales para que tumbe la propuesta de la líder de la excolonia, la prochina Carrie Lam, de permitir a Pekín que atrape a “fugitivos” en el territorio hongkonés para juzgarlos en China.

Las enmiendas, que en principio se votarán en el Legislativo autónomo este miércoles y podrían convertirse en ley a finales de mes, ha alimentado el temor a que la inexorable conversión de Hong Kong en una ciudad china más se lleve por delante y en breve, la preciada independencia judicial y el resto de las garantías y libertades que Pekín prometió mantener durante 50 años tras la devolución británica de la colonia en 1997.

El céntrico Victoria Park, donde se convocó a los manifestantes, no dío cabida para los cientos de miles de personas, en su mayoría jóvenes vestidos de blanco y portado lazos amarillos, símbolo de las manifestaciones en favor de la democracia de 2014 conocidas como la “Revolución de los Paraguas”.

Hasta ayer, la manifestación más grande celebrada en Hong Kong era precisamente la “Revolución de los Paraguas”, que llegó a congregar a medio millón de personas.

“Última oportunidad”. Una mujer que pidió permanecer en el anonimato alerto que “es nuestra última oportunidad de defender nuestro hermoso país (Hong Kong)” y resaltó la importancia de esta manifestación, la primera a la que acude desde el 4 de junio de 1989, en solidaridad con los estudiantes masacrados en la plaza pequinesa de Tiananmen en la madrugada de ese día.

“Pekín se ha ido impacientando con Hong Kong desde nuestro movimiento de los paraguas de hace cinco años. Nos ve como un adolescente rebelde que no aprende a ser agradecido y obediente”, aseguró la miembro del bando opositor del Consejo Legislativo de Hong Kong Claudia Mo.

“Hong Kong se está hundiendo rápido, como un pequeño bote, pero no vamos a dejar que esto suceda: vamos a luchar contra eso”, apuntó la política.

El régimen comunista, sin separación real de poderes, se comprometió en 1997 —cuando la soberanía de Hong Kong le fue devuelta de manos de Londres— a mantener el sistema dejado por los británicos hasta 2047, aunque la presión de Pekín sobre el archipiélago aumenta progresivamente.