Escenario

Metric en el Plaza Condesa, una fantasía que invade la realidad

Metric regresó a la Ciudad de México para confirmar su lugar como una banda consolidada. Con una potencia y sonido equiparable a la de cualquier banda capaz de llenar estadios, Emyly Haines y compañía reventaron el Plaza Condesa.

Metric regresó a la Ciudad de México para confirmar su lugar como una banda consolidada. Con una potencia y sonido equiparable a la de cualquier banda capaz de llenar estadios, Emyly Haines y compañía reventaron el Plaza Condesa.

Metric en el Plaza Condesa, una fantasía que invade la realidad

Metric en el Plaza Condesa, una fantasía que invade la realidad

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Metric es una de las bandas más emblemáticas de este siglo, a pesar de no haber alcanzado un éxito totalmente mediático, la agrupación originaria de Toronto se ha hecho de un nombre a base de discos potentes y el innegable carisma natural de su vocalista Emily Haines.

La expectativa sobre esta noche en el Plaza Condesa era bastante grande. La banda canadiense había visitado hace apenas un par de meses la capital actuando como abridores del show de Zoé en el Auditorio Nacional, sin embargo, el hambre de los fans rogaba por una fecha en solitario de la agrupación. En primera instancia, por los seis años de espera anteriores a su más reciente visita para poder verlos una vez más en la ciudad y en segunda, por la necesidad de escuchar muchas más canciones de su disco más reciente Art of Doubt.

A pesar de que El Plaza se encontraba a la mitad de su capacidad eso no mermo los ánimos de los asistentes ni de la banda, que desde un principio dejo en claro la tesitura de todo el concierto. “Black sheep” fue la primera canción en aterrizar sobre el escenario. Potente, sublime y delicada a la vez, Emily Haines conquisto en un segundo a todo el público reunido aquí está noche.

“Synthetica” y “Risk” continuaron con el set que confirmaba a cada segundo la madurez de la banda. Metric, alguna vez fue considerado el proyecto estandarte de toda una generación de bandas en Norteamérica que encontraban en el punk y garage una nueva voz. Hoy son una agrupación potente que por momentos quita el aliento debido a la solides con la que ejecutan canción tras canción.

Poco expresiva entre canciones Emily Haines se limita a intercambiar pequeñas frases con el público que se rinde a sus pies. La banda toco apenas el día anterior en uno de los festivales más importantes en Estados Unidos: el Austin City Limits (ACL), y a pesar del poco margen entre vuelos y traslados la banda se concibe fresca sin un ápice de cansancio a cuestas.

El concierto se va deprisa, muy al estilo punk clásico la banda deja pasar escasos segundos entre cada tema. Hasta llegar a clásicos como “Gimme sympathy” y “Gold guns girls”, que arrancaron alaridos de toda la fanaticada que hoy se entregaba incondicional en el Plaza.

Al final de su set dieron una sorpresa a todos los presentes tocando una canción inédita jamás ejecutada en vivo: “Common lives”, con las pulsaciones a mil, la banda cerro el concierto con una de sus canciones más icónicas “Help I’m alive” y un nuevo clásico para su trayectoria “Now or never”.

Metric cumplió en el Plaza Condesa el anhelo de los miles de fanáticos que esperaban desde hace tiempo un concierto en solitario de la banda canadiense. Y no es para menos, su sonido es brutal en vivo, son una aplanadora que no deja lugar a dudas de su lugar como una de las bandas más importantes del nuevo milenio.